Las biografías televisivas inundarán la pantalla. La producción de series de ficción basadas en la vida y obra de personalidades reconocidas por el gran público parece ser protagonista de la nueva era en la pantalla chica. Y la TV argentina no quiere ser menos. La enorme repercusión que este año alcanzaron propuestas como Luis Miguel, la serie (Netflix) y Sandro de América (Telefe), dos miniseries que iluminaron el lado público y privado de los artistas, aceleró el desarrollo de un género que tiene una larga tradición cinematográfica y que ahora pretende desembarcar con fuerza en la pantalla chica. En la actualidad hay al menos dos biografías que se encuentran en plena etapa de pre producción en la industria argentina. Esta vez, los hombres a iluminar desde la ficción no comparten la pasión por la música, sino más bien por el deporte: la vida y obra de Carlos Monzón y la de Carlos Tevez serán abordadas en proyectos televisivos que verán la luz en 2019. La biopic llegó para quedarse al mercado argentino, al menos por un tiempo.

Encontrar una historia fascinante y original, que sea capaz de atraer a las grandes audiencias, es lo que le quita el sueño a todo productor de ficción. Una búsqueda permanente, que no siempre emerge de la creatividad de un grupo de guionistas. La posibilidad de trasladar a la pantalla la biografía de alguna persona que haya descollado en algún ámbito es un recurso que simplifica algunas cosas, teniendo en cuenta que el género suele concentrar dos características difíciles de conseguir: historias que resultan familiares para buena parte del público y que, además, las figuras que retratan están rodeadas de algún rasgo de hazaña, injusticia o polémica. O todo junto. Que lo que se cuenta haya pasado en la “realidad”, aun cuando se trata de ficcionalizaciones, le imprime a la obra un nudo dramático potente, que la acerca a los espectadores. La garantía de repercusión de la biografía está asegurada: una biopic puede dividir aguas entre el público, la manera de abordar al protagonista puede enojar a fanáticos y conformar a otros tantos, pero nunca resultar indiferente a las grandes audiencias. Esa pareciera ser su clave.

“La biografía tiene de su lado el elemento de la veracidad”. El que lo afirma es Israel Adrián Caetano, el director que estuvo detrás de Sandro de América, la biopic del cantante argentino que se transformó en una de las ficciones de la temporada. “El espectador –analiza ante la consulta de PáginaI12– se presta al juego de otra forma, se predispone no solo a descubrir una historia, sino a ver algo que conoce pero no del todo. Es asombroso, y a la vez no –gracias a la penetración cultural y el snobismo de la clase media consumidora–, que ahora haya tanto interés por la biografía cuando hasta no hace poco no le interesaba a nadie. Pero así está la tele de hoy, no sólo para ofrecer qué consumir sino diciéndote qué consumir. Dentro de todo este lío las biografías se instalan”. 

Esquivando patadas entre las balas

El director uruguayo volverá a trabajar en el género llevando a la pantalla chica la traumática vida de Carlos Tevez, en una serie cuyo estreno está previsto para 2019. Caetano no sólo celebra la irrupción en la industria televisiva argentina del género sino la posibilidad de poder contar la historia de vida de figuras que llevan en su cuerpo y en su alma el ADN argentino. La biopic es, para el cineasta, la posibilidad de iluminar desde esas historias de vidas personales la identidad cultural de estas pampas.

“Una de las cosas más interesantes del género biográfico –analiza el director de Un oso rojo y Bolivia– es la marca de identidad. El caso de Sandro fue ejemplar. Un personaje bien argentino y querido. ¿De qué me sirve una serie sobre la reina de Inglaterra? De nada, más allá de entretenerme con pochoclo y fórmulas remanidas, vestuarios ostentosos y vueltas de tuercas que sólo sorprenden a un espectador desprevenido. ¿Qué tiene la serie sobre Luis Miguel? Tal vez un poco más de cercanía, pero no deja de ser algo foráneo. Desgraciadamente son siempre cosas lejanas, como si nos estuvieran contando un cuento de reyes y hadas mientras lo que ocurre cuando salimos a la calle es otra cosa. Pasa en la tele pero también en el cine, del cual la clase media se apoderó definitivamente para convertirlo en algo banal y sensacionalista. Creo que es imprescindible que un país se mire a sí mismo y produzca su propio arte. Mientras eso no ocurra, vamos a seguir siendo consumidores de lo que nos dicen que tenemos que consumir”.

El apache es el título tentantivo de la producción de Torneos, que el mes que viene comenzará a rodarse. Caetano cumplirá así un sueño postergado por años, ya que allá por el 2010 estuvo a punto de filmar una película sobre el jugador de Boca. Un proyecto que finalmente no vio la luz por los problemas económicos en los que ingresó la productora Rosstoc, encargada de la producción. El apache será un suerte de biografía oficial pero con la libertad creativa propia del director. “Es algo muy lindo, muy emotivo porque cuento mi vida que muy pocos la saben. Es algo muy fuerte para mí, para mi familia. Ya estamos muy adelantados. Para el año que viene vamos a estar presentando la serie”, señaló el propio Tevez a ESPN.

Al igual que Sandro..., El apache contará diferentes momentos en la vida del futbolista, que estará interpretado por lo menos por dos actores para dar fielmente con la figura de Tevez a través del paso del tiempo. Si bien se desconocen los nombres de los actores que se pondrán en la piel del jugador, sí trascendió que Cremonesi no sólo formará parte de Monzón sino también de esta producción, interpretando a uno de sus representantes. La biopic entrelazará su vida personal con la del futbolista consagrado que supo triunfar en Argentina, Brasil, Inglaterra, Italia y China. Sin embargo, hará foco principalmente en su dura infancia en el barrio Ejército de los Andes, conocido popularmente como Fuerte Apache.

“Lo interesante de Tevez es lo que más miedo da de contar”, reconoce Caetano. “Tuve la oportunidad de charlar con Tevez y lo que cuenta de su infancia es lo más rico de todo. El mundo de los jugadores consagrados es poco interesante: más o menos tienen todos el mismo derrotero, la mayoría se hacen millonarios y se preocupan más de su imagen que de otra cosa. Pero la niñez es algo puro. Y es en esa pureza, rodeada de una violencia desmadrada, donde hay en Tevez un niño que sobrevive y triunfa. Pero no sólo a base de esfuerzo y de trabajo, sino también esquivando las balas. Es una historia tan real como diferente y atractiva. Si podemos contar la verdad, si la barrera se levanta y nos permite cruzar a ese mundo, el de Fuerte Apache, del que pocos saben cómo es en realidad, hay una gran serie por delante. Hay miles de futbolistas argentinos que salieron de lugares humildes, como Maradona sin ir más lejos, pero en el caso de Tevez la humildad fue acompañada de una protección inevitable. Porque no siempre las balas eran perdidas”.

En esa búsqueda de verosímil que intentará imprimirle a El apache, el director adelanta que para la niñez de Tevez en Fuerte Apache encontró a un “fantástico” niño actor. “No solo –aclara Caetano– por su parecido con Tevez, sino porque tiene algo que mucha gente tiene en el Fuerte Apache, como una madurez temprana, como un niño con comportamiento de un hombre grande. Porque lo primero que hace la pobreza es eso: matar la infancia”. La serie sobre la vida de Tevez aún no tiene pantalla confirmada. 

Claroscuros de un campeón

La ambivalente vida de Carlos Monzón, el campeón mundial de boxeo, también será llevada a la TV, de la mano de Pampa Films, en coproducción con Disney Media Distribution y asociados a Turner. Su humilde infancia en Santa Fe, el acercamiento al boxeo, sus años de gloria como campeón mundial de peso mediano, su mediático vínculo con Susana Giménez, la fama y el asesinato de Alicia Muñiz en el verano de 1988, la posterior condena a once años por homicidio simple y su trágica muerte serán algunos de los momentos que contará Monzón. Ganador en 2017 del primer concurso de producción audiovisual del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), el proyecto comenzó a grabarse en escenarios de Argentina y el exterior.  “Desde Pampa Films estamos muy entusiasmados y nos sentimos orgullosos de encarar esta producción de la mano de Disney Media Distribution Latin America. Estamos frente al gran desafío de retratar a uno de los ídolos populares del pueblo argentino. Desde la pobreza extrema a codearse con las máximas figuras mundiales, Monzón tuvo una vida fascinante. Esta serie mostrará una historia de superación pero plagada de contradicciones, de la cual resultará difícil permanecer indiferente”, expresó Pablo Bossi, de Pampa Films, la empresa creadora de la ficción.

La serie biográfica sobre la vida del boxeador, que entre 1970 y 1977 defendió su título 14 veces, contará con trece episodios de una hora de duración. Aunque la producción se mantiene en estricta reserva, PáginaI12 supo que la trama tendrá dos líneas de relato, para las cuales serán dos los actores que interpretarán a Monzón: el papel del joven boxeador que conquista la gloria deportiva recayó en un intérprete desconocido surgido de un casting público y abierto, mientras que los años de la adultez está interpretado por un actor conocido cuyo nombre no trascendió. También es un secreto bajo siete llaves la manera en que se tratará el asesinato que le cometió a su pareja, ni tampoco el peso que tendrá ese hecho en la vida de Monzón a lo largo de la serie. Un aspecto no menor teniendo en cuenta la manera en que se trató el femicidio en su momento y el paradigma cultural actual. Lo único que trascendió es que el actor Diego Cremonesi (Un gallo para Esculapio, El marginal) se pondrá en la piel del fiscal del juicio conocido como “Caso Monzón”. 

La trama de Monzón contará diferentes momentos de su vida, a partir de las visitas que el boxeador recibió durante los años en los que estuvo preso, hasta el accidente automovilístico en el que perdió su vida el 8 de enero de 1995. La serie, cuyo estreno está previsto hacia abril de 2019, tiene garantizada la emisión por Space como primera ventana, aunque sus productores negocian con Telefe para que también pueda verse por la TV abierta.