El intendente de Mar del Plata anunció que las “dos fiestas (de música electrónica) que ya estaban solicitadas y que ya vendieron entradas se van a permitir bajo condiciones especiales de seguridad” y que por eso este fin de semana se podrán realizar tal como estaba programado. Sin embargo, Carlos Arroyo también advirtió que el decreto 112/2017, según el cual el municipio no dará autorizaciones para eventos de ese tipo, “sigue vigente en toda su extensión”. La autorización de las fechas convocadas por los boliches de Mute y Destino Arena fue concedida tras una reunión de Arroyo con empresarios, pero “el resto (de lo programado para la temporada) quedará librado a mérito y conveniencia en cada caso de la autoridad de la Municipalidad”, señaló el funcionario en conferencia de prensa ayer por la tarde. Por su parte, los responsables de Mute anunciaron en un comunicado que son “optimistas en seguir dialogando para llegar a consensos que permitan el normal desarrollo del resto del cronograma de espectáculos” de la temporada.En un comunicado, el municipio detalló que firmó un acta con los responsables de los paradores Destino Arena y Mute para acordar distintas medidas a aplicar en los eventos de sus boliches para este fin de semana. En el caso del primer lugar, “se acordó que además del operativo de seguridad y de salud pública ya programado, la empresa garantizará un puesto médico interno integrado por 3  enfermeros”, mientras que en el segundo lugar se acordó destacar “6 enfermeros y 3 médicos”. Además, “el municipio garantizó que habrá botiquines e insumos (suero, desfibrilador, etc.) con las condiciones exigidas por la Secretaría de Salud, 5 ambulancias en el parador Mute y 2 ambulancias en el Parador Destino Arena, la contratación de servicio de guardia para la eventual asistencia médica en el Hospital Privado de Comunidad, 15 Socorristas, cese del expendio de bebidas alcohólicas a partir de las 4.30, contador de ingreso de personas con cartelería para limitar el ingreso de personas a lo solicitado”.

A ello se sumó el acuerdo para que agentes municipales refuercen “las tareas de control y prevención”, y que los gastos de horas extras que eso genere “serán solventados por los empresarios”.

Arroyo insistió en la vigencia del decreto que estipula que la municipalidad no dará autorizaciones a fiestas electrónicas. “Sigue vigente en toda su extensión porque debo recordarles que siempre las disposiciones legales son para el futuro, no para atrás, no son retroactivas”, dijo el intendente en conferencia de prensa. En tanto, el secretario de Gobierno de Pinamar, Guillermo Benítez, aseguró que en esa localidad “no hay ninguna medida para suspender” las fiestas electrónicas. “Las fiestas electrónicas nunca fueron un problema” y “la música no mata”, dijo Benítez, quien advirtió que en Pinamar los eventos “tienen un control del Estado y el boliche tiene que estar autorizado”.