4 mil pesos que se aportan a cada beneficiarix de los casi 300.000 que figuran en planes centrales como por ejemplo Ellas Hacen, destinado a mujeres en situación de vulnerabilidad y que prioriza a madres de familias numerosas –con hijxs con capacidades diferentes o víctimas de violencia de género–, los seguiría aportando el Estado pero a las empresas, para subsidiar el salario básico de convenio, explicó esta semana el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, encantado con la idea de transformar los planes en un engendro de trabajo formal aún impreciso que las organizaciones sociales sospechan como un achique del costo fiscal, pero bajándole el presupuesto a las políticas públicas.