"Si se elimina el Ministerio de Salud, habrá menos campañas de prevención y promoción de la salud y pueden desaparecer programas y suministros para la atención de la población." La advertencia fue hecha por los trabajadores del ex ministerio de Salud este mediodía durante un "abrazo" al edificio de 9 de Julio y Moreno, tras la decisión del presidente Mauricio Macri de degradar al rango de secretaría las funciones del área encabezada por Adolfo Rubinstein, con el objetivo de cumplir con las exigencias del FMI.
La movilización fue convocada por la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (Fesprosa) y ATE, entre otros gremios, organizaciones sociales e integrantes del "Movimiento por el Derecho a la Salud", que repudiaron la decisión del Ejecutivo de transformar el ministerio en una secretaría dependiente del Misterio de Desarrollo Social, encabezado por Carolina Stanley. Producto de la decisión de la Casa Rosada comenzaron a circular las versiones de la probable renuncia de Rubinstein, quien quedará subordinado a Stanley, quien se plantó en la vereda opuesta al actual secretario durante el debate por la legalización del aborto.
La degradación del ministerio de Salud, cuyos únicos antecedentes se registraron durante las presidencias de Pedro Eugenio Aramburu y Juan Carlos Onganía, tras los golpes militares de 1955 y 1966, tuvo una inmediata reacción el lunes pasado con la renuncia del titular de la Dirección de Sida, Enfermedades de Transmisión Sexual, Hepatitis y Tuberculosis, Sergio Maulen, quien dio un paso al costado por el "recorte en las partidas" que conllevará la decisión del Gobierno, tal como denunciaron los gremios del sector, que mantuvieron una reunión con Maulen antes de su alejamiento.
"Al Gobierno no le interesa la salud", sentenció el ex ministro de Salud Ginés González García, uno de los dirigentes políticos presentes en el acto de este mediodía. Tras la concentración frente al edificio de la 9 de Julio, las diputadas, diputados, ex ministros y trabajadores participaron de una conferencia de prensa colectiva en la Cámara de Diputados.
"Vamos hacer todo lo necesario para que esta medida sea revisada y corregida", advirtió el vicepresidente de la comisión de Salud, Pablo Yedlin, del bloque Argentina Federal, que representa a los gobernadores peronistas, bloque clave para la aprobación del Presupuesto 2019. El legislador y médico sanitarista también manifestó su preocupación acerca de la falta de antecedentes de la ministra Stanley en el área de la salud pública.
"Nosotros tenemos otra mirada, no creemos en el achicamiento del Estado, creemos en Estados fuertes. La mirada de los gobiernos liberales-conservadores es la de Estados mínimos, con recaudación corta y pocas prestaciones", denunció el titular del bloque del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, mientras la diputada del Movimiento Evita, Araceli Ferreyra, advirtió que se trata de "achicar el Estado para aumentar las ganancias de las corporaciones".
De la conferencia también participaron los diputados Cecilia Moreau, Daniel Arroyo (Frente Renovador), Carolina Moisés (Justicialista), Nicolás del Caño, Romina González Seligra y Romina Del Plá (PTS-FIT), Mónica Macha, Cristina Álvarez Rodríguez, Laura Alonso y Roberto Salvarezza (Frente para la Victoria), entre otros.
