El ajuste en Cultura se empieza a sentir. A pocos días de que el gobierno oficializara la eliminación del ministerio de Cultura y su pase a secretaría bajo la órbita de la cartera de Educación, y pese a que el ahora secretario Pablo Avelluto negara que eso implique una reducción presupuestaria, PáginaI12 accedió a distintos datos que demuestran que no sólo hay achique sino que el recorte podría ser aun peor. Si el año pasado se gastó sólo el 88 por ciento del presupuesto asignado, el relevamiento de los programas inactivos o vaciados que hay hasta el momento permite pensar que cuando termine el año esa cifra será mucho menor. También permite vislumbrar un futuro oscuro y una lucha más aguda por parte de la comunidad de cara a lo que viene. Mientras tanto, salvo las declaraciones de Avelluto, todavía no hubo comunicación oficial de la ex cartera cultural, que en su página web parece no haberse enterado de las modificaciones.

Según datos aportados por la Junta Interna de ATE, en el ahora ex ministerio la reducción en planes y programas fue brutal. De acuerdo a lo que consignaron en un muy completo informe, sólo este año se vieron afectados de distintas formas el programa Becar cultura, el Fondo Argentino de Desarrollo, el área académica de la Dirección de Elencos Estables, el área de danza (el programa Factoría en Danza fue desmantelado la semana), la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares, el programa Libro %, la Red de Puntos de Cultura, el programa de Lenguas Originarias, el programa de Orquestas Infanto-Juveniles y el concurso “Vamos las bandas”, entre otros. A esto se suma la situación –varias veces denunciada por este diario– de los museos nacionales, que cuentan con gravísimos problemas presupuestarios, de infraestructura y de precarización laboral, entre otras cuestiones.

En detalle, el informe de ATE consigna, entre otras cosas, que este año no habrá presupuesto para actividades especiales en la Noche de los Museos (organizada por el ministerio porteño), una de las acciones más convocantes en el año; que la prometida obra del Museo Mitre tampoco empezó (de hecho la restauración de su fachada se canceló y se pusieron gigantografias para tapar las paredes rotas), y que la imprenta histórica alojada en la ex Biblioteca Nacional se encuentra inactiva desde el despido del único linotipista que la operaba y desde que se le cayó el techo durante una tormenta hace dos meses. También, que dentro de la cooperación internacional, el ahora ex ministerio no pudo representar al país en la reunión semestral de Mercosur Cultural porque no contaba con el presupuesto para dos pasajes de avión a Asunción, Paraguay.

Por otro lado, según confiaron a PáginaI12 distintos trabajadores y trabajadoras de museos, debido a la falta de presupuesto las instituciones registran paredes en mal estado, salidas de emergencia mal señalizadas; falta de sanitarios, de matafuegos y de cámaras de seguridad y demás material tecnológico;  instalaciones eléctricas sobrecargadas; obras arruinadas por filtraciones de humedad; falta de calefacción y aire acondicionado y ascensores fuera de servicio; además de sus males centrales: la precarización laboral y el deterioro en la infraestructura y el patrimonio de los establecimientos, que se encuentran repartidos por todo el país. Algunos ejemplos: los Museos del Grabado y Oriental siguen sin tener una sede (sus colecciones se exhiben como exposiciones temporarias donde les presten el lugar), el Museo Yrurtia sigue cerrado por la paralización de su obra eléctrica, el Museo Terry (Tilcara) y el Museo Sarmiento (Capital Federal) debieron mover sus colecciones por problemas de derrumbe, el Museo Jesuítico (Alta Gracia) también sufrió el derrumbe de unos de sus techos, y la histórica Manzana de las Luces se encuentra en estado de abandono y cierre.

Frente a este panorama, y luego de los anuncios de esta semana, los trabajadores y trabajadoras de la ahora secretaría votaron en asamblea poner en marcha un plan de lucha “para demostrar que la Cultura no se achica” y articular acciones con los trabajadores de los organismos artísticos del ex ministerio, tales como el Incaa, y también de otros ex ministerios bajados de rango. En esa línea, el próximo lunes habrá una nueva asamblea masiva en la sede central de Cultura (Av. Alvear 1690) y el miércoles una “caravana cultural” en el marco del paro nacional de ATE. El 21 de este mes, en tanto, habrá una jornada en defensa de la cartera en coincidencia con el día del artista plástico. “Defenderemos nuestros puestos de trabajo en riesgo y también la función social que cumplimos”, expresaron.