El conflicto en las inmediaciones de la estación de Once se reactivó ayer con nuevas protestas, cortes intermitentes de calles y otra represión de la Policía de la Ciudad. El renovado conflicto se originó con un grupo de manteros que quedó fuera del acuerdo y reclama ser censado para acceder a un beneficio prometido a los puesteros. Un fuerte operativo policial dispersó a los manifestantes y detuvo a cinco personas.

Los incidentes comenzaron cuando el grupo que llegó temprano a la Agencia Gubernamental de Control (AGC), en Perón al 2900, con la intención de censarse, encontró cerrado el lugar, y se trasladó a la esquina de Bartolomé Mitre y Pueyrredón para exigir la presencia de las autoridades, y tras cortar la avenida fue obligado a subir a la vereda por el personal policía apostado allí.

Una fuente del ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad explicó que “el censo terminó ayer (por el jueves)”. “El censo se realizó martes, miércoles y jueves”, agregó, aunque frente a la convocatoria de personas que pedían ser registrados, aseguró que el gobierno “está evaluando” la situación.

Cerca de las 11, un nuevo grupo de manteros se sumó al conflicto e inició discusiones con personal policial que formaba un cordón sobre la avenida Pueyrredón para impedir un nuevo bloqueo.

Pasadas las 12, camiones hidrantes se sumaron al operativo con la orden de no permitir el corte de calles y avanzó sobre los manifestantes, que respondieron arrojando palos y piedras, lo que generó algunos incidentes y corridas. Tras algunas refriegas, fueron detenidas cinco personas “por resistencia a la autoridad”, informó la policía, y finalmente la zona quedó liberada, aunque permanecieron las fuerzas de seguridad.

La estación de trenes de Once permaneció cerrada algunos minutos, tras lo cual volvió a funcionar normalmente el servicio.

Por su parte, el ministro de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad, Eduardo Macchiavelli, afirmó que un total de 680 manteros fueron censados hasta el jueves y que a partir de ahora “se inicia una nueva etapa con la realización de cursos, el pago de impuestos y la incorporación a la economía formal”. “A partir de la semana que viene todos aquellos que se hayan censados y completado el trámite de inscribirse en el monotributo social, y sacado una caja de ahorro en el Banco Ciudad, arrancan con un curso de capacitación de 60 días, y el día 61 van a disponer de un lugar en algunos de los dos predios dispuestos por el Gobierno en las cercanías de Once”, agregó el funcionario porteño.

Las personas que acudieron ayer a la protesta se quejaban por haber sido convocados para el censo y haber encontrado las puertas cerradas de la sede oficial. Aníbal Mariño, uno de los puesteros, aseguró que “lamentablemente vinimos ayer al censo pero nos dijeron que el cupo estaba cubierto. Hoy vinimos de nuevo y nos cerraron la puerta en la cara, nos cerraron la persiana. Por eso nos vimos obligados a cortar Pueyrredón, somos laburantes, queremos laburar, no queremos hacer quilombo, queremos trabajar”, señaló.

Denis, otra vendedora, dijo que “hoy iban a censar a partir de las 9 de la mañana, yo estoy con mi bebé haciendo cola desde las tres y cuando deberían haber abierto, no vino nadie, nos bajaron la persiana y nadie se hace cargo”.

El fiscal general adjunto de la Ciudad, Luis Cevasco, dispuso a inicios de la semana impedir la venta callejera, lo que ocasionó el martes el operativo de desalojo en Once, que derivó en las protestas de manteros, una represión policial y las posteriores negociaciones con autoridades de la Ciudad, hasta llegar el miércoles a un acuerdo, por el cual se prevé el traslado de los puestos a dos galpones ubicados cerca de la plaza Miserere.

El pacto contempla además la realización de una capacitación de 60 días por la que los manteros recibirán un subsidio mensual de 11.700 pesos pagados por la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

En la jornada de ayer no se vio en la protesta a los representantes de manteros que negociaron con autoridades durante la semana, pero estuvieron en el lugar un centenar de personas que buscaba registrarse para recibir los beneficios.