El dólar se disparó ayer otros 29 centavos y alcanzó la nueva marca histórica de 40,53 pesos, pese a los intentos del Central para ponerle un techo. En la semana la suba fue 7,2 por ciento. Durante los cinco días hábiles en los que la demanda de divisas no menguó entre inversores y ahorristas, el organismo monetario que conduce el financista Luis Caputo intervino de manera directa en el mercado de cambios pero además retomó las subastas de divisas que convalida el Fondo Monetario. Ayer anunció un plan de seis puntos para atacar directamente el exceso de liquidez en pesos de los bancos y fondos de inversión que parece tener como único destino hace varias semanas la compra de dólares (ver página 4). Con escaso volumen de negocios y sin ingreso genuino de divisas por parte del sector privado, el alza en el mercado mayorista fue imparable y no bastó la adjudicación de 75 millones de dólares por licitación del Central ni la venta directa de 206 millones. El mayorista cerró a 39,86 pesos, 31 centavos más que el jueves. Las reservas finalizaron en 50.003 millones de dólares, con un retroceso de 529 millones. 

El impacto de la errática administración del tipo de cambio se tradujo en una profundización de la pérdida de reservas. No sólo por efecto del casi nulo éxito en la tarea de frenar la corrida cambiaria sino también por el impacto en las expectativas. Desde el lunes 27 de agosto, fecha en que comenzó la disparada que llevó el tipo de cambio de 31,57 a 38 pesos en sólo cinco días hábiles, la caída de depósitos medido hasta el martes (último dato disponible) alcanzó los 1560 millones de dólares. El impacto en las reservas de las intervenciones y de la caída de las colocaciones de privados fue un retroceso de 13.271 millones de dólares. Ayer se conoció además que el segundo desembolso del Fondo pactado en junio, por 3000 millones de dólares, fue suspendido por el organismo hasta que se alcance un acuerdo con el Gobierno (ver página 3). Ese monto iba a servir de refuerzo para las reservas. 

Lejos de identificar el problema doméstico con “tormentas” externas, esta semana hubo una serie de factores, rumores e indicadores económicos locales que impulsaron la demanda de dólares como cobertura. El Ministerio de Hacienda no logró renovar la totalidad del vencimiento de letras de esta semana. Adjudicó 763 millones de dólares contra un vencimiento de 900 millones y parte de los pesos excedentes fueron al mercado de cambios mientras se incrementaban los rumores sobre una supuesta dolarización de la economía argentina a partir de las declaraciones de un asesor del presidente estadounidense Donald Trump. 

Entre los indicadores económicos, el jueves se conoció una inflación para agosto de 3,9 por ciento y la proyección para septiembre la ubicaría en 6 por ciento. Ante una política que parece no dejar que el dólar se atrase contra los precios internos, la expectativa es que el Central lo dejará correr para adecuarse al aumento en los precios internos.

La próxima semana habrá además vencimiento de letras por unos 300.000 millones de pesos, lo que generará tensiones en el mercado de cambios porque el exceso de pesos que no se renueven se volcaría al dólar. De hecho, el organismo monetario anunció que sólo renovará 150.000 millones, la mitad, y en consecuencia aplicará una serie de medidas tendientes a absorber por otros canales esa liquidez (ver aparte).

Durante la jornada de ayer el Central inició la rueda con una intervención puntual para intentar desactivar otro día más de alza. La primera transacción en el mercado mayorista fue de 89,90 pesos, máximo que había alcanzado durante la rueda previa. En esa primera aparición, el Central realizó ventas netas por 206 millones de dólares. 

Si bien logró un recorte en ese momento hasta los 39,35 pesos, los precios retomaron la tendencia alcista hasta ubicarse por encima de los 39,80. En el final del día, cuando el precio del mayorista volvió a acercarse a la marca de los 40 pesos, el Central subastó otros 200 millones de dólares y el monto que adjudicó fue de 75 millones a un precio promedio de 39,84 pesos. El cierre de la jornada en ese segmento se mantuvo así por debajo de los 40 pesos, pero por encima del jueves. El traslado al minorista fue a un nuevo record de 40,53 pesos. 

Las apuestas en el mercado a futuro para la divisa reunieron negocios por 404 millones de dólares. Los precios pactados en el Rofex (mercado rosarino de futuros) se ubicaron en 40,40 pesos para fin de mes y en 42,50 para el último día de octubre próximo. Para fin de año las negociaciones de cobertura del dólar finalizaron en 45,45 pesos.