El Gobierno de la Ciudad quiere cerrar el jardín maternal que funciona en el Hospital Ramos Mejía y prometió el traslado de las salas de 3, 4 y 5 años a una escuela cercana que va a acondicionar. Pero en el traslado se “olvidó” del lactario, la sala de deambuladores y la de 2 años. Nueve docentes quedan sin su puesto y 12 bebés sin vacantes, ya que hoy cierra la inscripción on line. Docentes y trabajadores del hospital se juntan hoy al mediodía en Venezuela y Urquiza para defender el jardín.