La quita de subsidios al transporte público que decidió el gobierno nacional suma reproches y alimenta el espíritu opositor a Cambiemos en los municipios. Muestra de eso fue la reunión de varios intendentes de la región metropolitana de Rosario, convocados por Mónica Fein. “Si el gobierno cumple lo prometido, el 1° de enero vamos a tener un impacto altísimo: el boleto se irá a 30 pesos como mínimo, y el interurbano se va a duplicar”, vaticinó la jefa municipal este martes, al término de una ronda de intendentes y presidentes comunales del departamento Rosario, y en simultáneo con el despacho favorable en el Congreso de la Nación que dispuso que este miércoles se trate el resistido proyecto de ley de Presupuesto 2019.

La socialista reprobó la actitud del gobierno nacional. “Dicen ‘me retiro de los subsidios y les dejo el problema a ustedes. Vayan a hablar con sus gobernadores’", se quejó. A su lado, sus colegas refirieron el impacto que la suba de costos hará en estudiantes y trabajadores que se valen del colectivo.

El intendente de Pérez, Pablo Corsalini (PJ), señaló preocupación porque “esto impactará negativamente en estudiantes, trabajadores, en vecinas y vecinos que tienen una vida muy activa con la ciudad de Rosario, con Villa Gobernador Gálvez, y esto se siente permanentemente en el bolsillo de los que menos tienen”. Al lado, su par de Villa Gobernador Gálvez, Alberto Ricci, destacó que en su ciudad hay 50 mil usuarios del transporte público. “Llevarle el boleto a 30 o 40 pesos es cargarle piedras en la mochila al que menos fuerza tiene”, dijo.

Fein se encargó de simplificar la decisión de Casa Rosada. “Nación parece decir: transfiero responsabilidades a las provincias, pero sin los recursos. Al Fondo Federal Solidario lo retiran también y es un recurso que aportamos todos, al igual que el impuesto a los combustibles líquidos, que el gobierno nacional seguirá recaudando”, protestó la titular del Palacio de los Leones.

A los intendentes no les cayó bien que el fin de semana el diputado Federico Angelini dijera que Nación continuaría solventando el transporte público. Es que se trata de una verdad parcial: el fondo especial de asistencia a todos los municipios del país, cosa que no superará los 5 mil millones de pesos, poco más del 10 por ciento de lo que representó el subsidio nacional en 2017.

Que el control de ese fondo quede en manos del ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, mereció una rotunda reprobación por parte de la intendenta rosarina: “Ojalá que en el Presupuesto sea clara la forma de distribución. No creemos que sea positivo que un ministro tenga discrecionalidad en la distribución de recursos. Ese es el inicio de los procesos de corrupción porque va a haber un empresario que va a golpear la puerta y obtendrá un beneficio distinto de otro”, imaginó.

En este sentido, reclamó: “Creemos que los mecanismos de distribución deben ser transparentes y claros desde el inicio, por números de pasajeros, de unidades, por kilómetros recorridos, como quieran pero transparentes y para todos iguales”.

Por otra parte, analizó Fein que “el gasoil sigue subiendo, el salto del dólar cambió el precio de los ómnibus nuevos, y todavía falta definir la paritaria de UTA”, conjugó Fein, advertida de la compleja situación en ciernes. “Nos preocupa nuestros vecinos. Esto hará que el boleto se vaya a 30 pesos como mínimo”, dijo.

Más pesimistas están los empresarios de colectivos en la ciudad de Santa Fe. Allí plotearon sus unidades con una leyenda comparativa y elocuente: “En Buenos Aires, $13. En Santa Fe, $40”.

A la cita asistieron los presidentes comunales de Acebal,Alvear, Coronel Domínguez, Empalme Villa Constitución, Ricardone, Soldini, y representantes de los municipios de Granadero Baigorria, Pueblo Esther, Zavalla y hasta Funes, a pesar de su pertenencia a Cambiemos.