El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó que está dispuesto a paralizar el gobierno si el Congreso no le otorga la financiación para construir el muro que separe la frontera entre Estados Unidos y México. En una entrevista publicada ayer en el diario online Político, el mandatario manifestó que quiere que el Congreso apruebe una partida de 5.000 millones de dólares. Ese dinero contempla la construcción de la barrera física pero no la seguridad fronteriza, por lo que aún no se sabe cuál es el monto exacto que cubriría las dos propuestas. “Políticamente hablando, ese asunto (la batalla sobre el muro) es una ganancia total”, manifestó el mandatario en la entrevista. “Creo que el muro es un tema tremendo, pero mucho más importante y también muy necesario es la seguridad fronteriza. Realmente lo necesitamos”. Sin embargo en otra entrevista publicada ayer en The Washington Post Trump afirmó que está evaluando otras alternativas a la construcción del muro. “Si no lo conseguimos, ¿podríamos hacerlo de otra manera? Hay otras formas posibles de hacerlo. Ya vieron lo que hicimos con los militares, simplemente llegamos con el alambre de púas y las vallas y varias otras cosas”, explicó el mandatario al matutino. 

En tanto, varios dirigentes demócratas, entre ellos el líder de la minoría del partido de la oposición en el Senado, Chuck Schumer, se mostraron dispuestos a aprobar una partida de 1.600 millones de dólares. Por su parte, el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, repitió en varias ocasiones que le gustaría conseguir los 5.000 millones de dólares que pide Trump para la construcción del muro. El último pacto bipartidista en julio sobre esa cuestión resultó en 1.600 millones de dólares para la propuesta estrella de Trump, después de que los republicanos incluyeran el muro dentro del presupuesto para el Departamento de Defensa.

El plazo para aprobar la partida es el siete de diciembre. Además, ese mismo día el congreso debe aprobar los presupuestos para financiar los departamentos de Seguridad Nacional, Justicia y el Departamento de Estado. 

Sin embargo,luego de las últimas elecciones legislativas los demócratas recuperaron la mayoría en la Cámara, mientras que los republicanos lograron aumentar su mayoría en el Senado. Por lo tanto, con la nueva composición parlamentaria, que comenzará a funcionar el próximo tres de enero, para Trump será más difícil conseguir apoyo. 

La amenaza de cierre del Gobierno se produce en un momento crítico cuando cerca de 6.000 migrantes centroamericanos esperan en la ciudad mexicana de Tijuana para pedir asilo en Estados Unidos. Hasta ahora, Trump envió a la frontera con México a 5.800 soldados y, en las últimas semanas, los agentes migratorios de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) reforzaron la frontera con 20 kilómetros de alambres de púas.