El tribual Arbitral del Deporte (TAS) desestimó hoy el pedido provisional de Boca para suspender la revancha de la final de la Copa Libertadores con River en Madrid. Es el tercer rechazo al pedido de Boca en los escritorios. El Tribunal de Disciplina de la Conmebol había fallado en contra del pedido del club de la Ribera el 29 de noviembre, y antes de ayer la Cámara de Apelaciones del ente rector del fútbol sudamericano había ratificado la medida.

Entonces, tras el segundo rechazo, Boca decidió acudir de urgencia al TAS. Lo hizo ayer a través de una solicitud urgente de medidas provisionales. La dirigencia encabezada por Daniel Angelici buscó que se revoque el fallo de la Cámara de Apelaciones de la Conmebol y se descalifique a River por los incidentes del 24 de noviembre, cuando una agresión al micro que transportaba al plantel al Monumental impidió que se jugará la revancha de la final.

Así las cosas, el TAS se tomará su tiempo para analizar el reclamo ante la Conmebol, tras desestimar el pedido de urgencia. “Los fundamentos jurídicos de la apelación serán analizados con posterioridad por una Formación Arbitral del TAS”, manifestó el TAS en un comunicado, en el que advierte que “el procedimiento arbitral seguirá su curso con el intercambio de escritos”. De este modo, la resolución de fondo por parte del TAS se conocerá dentro de varios meses.

La resolución del TAS estira el capítulo judicial de la final.

A 24 horas del choque en Madrid, fracasó así la estrategia de Boca de aplazar el partido con River en el estadio Santiago Bernabéu hasta que hubiera un fallo del  TAS. El cotejo se disputará, si bien Boca persistirá en la vía legal, por lo cual deberá adjuntar fundamentos que justifiquen la descalificación de River por los piedrazos contra el micro xeneize.

A su vez, River deberá hacer su descargo mientras el TAS reúne el panel de árbitros encargados de analizar el caso. Los representantes de los dos clubes tendrán una audiencia en Lausana, Suiza, sede del TAS, para exponer sus argumentos. Luego, los jueces del TAS se tomarán unas semanas antes de dar a conocer el fallo final.

La jurisprudencia marca que nunca se le quitó en el escritorio un título a un equipo que lo hubiera conseguido en la cancha. Por ello, se supone que si River gana la Copa y luego es condenado por el TAS, la sanción sea de una multa para el club y para la Conmebol, pero no sería despojado de su título.