Juristas de Argentina y Brasil le presentaron al papa Francisco un informe que da cuenta de las persecuciones políticas y judiciales contra dirigentes opositores a los gobiernos de derecha en latinoamérica, y a ex presidentes sudamericanos como José Inácio Lula Da Silva, Cristina Kirchner y el ecuatoriano Rafael Correa. “El Papa comparte esta preocupación”, aseguró el abogado argentino Roberto Carlés, uno de los participantes del encuentro.

El escrito elaborado por la Asociación de Jueces para la Democracia de Brasil da cuenta del contexto de creciente criminalización de los movimientos sociales y de las luchas por los derechos humanos a través de de la utilización de un sector del Poder Judicial. Fue presentado por Carlés, su par brasileña Carol Proner, el artista Chico Buarque y la militante italiana Grazia Tuzzi.

Los cuatro se reunieron ayer con el Papa argentino durante 45 minutos en la residencia de Santa Marta, en la ciudad del Vaticano, según dio cuenta el diario italiano La Stampa. Allí le plantearon Bergoglio el escenario de "creciente judicialización selectiva de la política" en la región a través de las denominadas "guerras jurídicas" que ponen en juego la democracia.

"No es exagerado reconocer que el lawfare (guerras jurídicas) es uno de los mayores peligros para la democracia del mundo y no sólo para América Latina", advirtieron en el escrito.

El informe explica situación procesal de varios líderes políticos latinoamericanos que sufrieron procesos judiciales y que “están sometidos a investigaciones imparciales, con violación a garantías constitucionales y una abierta violación a los principios del Estado de derecho, como se está viendo en los distintos países”, enumeró Carlés al Vatican Insider.

El motivo fue también contarle al Papa “la situación del Estado de Derecho en América Latina”, agregó y sostuvo que “el Papa por supuesto, comparte esta preocupación”. Carlés agregó que uno de los objetivos es “informarle en forma permanente de los distintos avances y cambios, la evolución de las situaciones de los políticos”.

Además, remarcó que a Bergolio siempre le preocupó la corrupción, pero también “la instrumentalización de la corrupción para otros fines”, y deslizó que en este marco estarían los procesos abiertos contra Da Silva, Fernández de Kirchner y Correa, quienes cuentan con un amplio capital político para competir por algún cargo político.