Eduardo Trasante renunció a su banca como concejal de Ciudad Futura, tras una denuncia de acoso y asumirá en su lugar Jesica Pellegrini, abogada de las querellas de juicios por delitos de lesa humanidad. El pastor evangelista presentó su dimisión "para participar voluntariamente del protocolo preventivo de violencias de género que viene funcionando en Ciudad Futura desde hace un año. Ante una reciente denuncia de un hecho de acoso agravado en este caso por el lugar de poder y de representación, la cual fue asumida, se activó como en cualquier otro caso el protocolo preventivo", dice el contundente comunicado que Ciudad Futura dirigió a "compañeras, compañeros, afiliados, simpatizantes y votantes de Ciudad Futura".

Ciudad Futura definió lo ocurrido como "algo que nos duele, pero nos reafirma a la vez. Porque no son solo las cosas que pasan sino la actitud que tomamos ante ellas, es decir lo que hacemos, lo que mejor nos define". Trasante participará voluntariamente del protocolo". "El primer paso es correr a la persona de los lugares de referencia, poder o representación que tenga. Y como en Ciudad Futura todos somos iguales y no hay privilegios, se activa de la misma manera aunque se trate de un concejal", sostuvieron.

La organización toma distancia también del punitivismo. "No hace falta que se cometa un delito para que alguien sea corrido del cargo. Hay algo del orden del compromiso ético, de una cuestión de ejemplariedad del ejercicio de las funciones de representación y del tipo de vínculos militantes que entablamos entre nosotrxs, que se rompió y por lo tanto debe ser reparado", dicen y reafirman: "Se trata, en definitiva, de qué cosas en Ciudad Futura no se pueden hacer, o que cuando se hacen no deben ser ocultadas o minimizadas. Estamos convencidxs que, en este sentido, los ejemplos deben ser de arriba hacia abajo y está bien exigirnos más. Por eso, la decisión tiene que ver con evitar ambigüedades y dar un mensaje claro y contundente para erradicar las prácticas machistas y patriarcales de nuestra sociedad".

Ciudad Futura hace hincapié en la transformación de los vínculos. "El patriarcado opera en todos los rincones de nuestra cultura y ninguna organización de ningún tipo está exenta de prácticas machistas que son la base para el desarrollo de las violencias. Lo que debería diferenciar a las organizaciones políticas es qué tipo de respuestas da cuando una situación aparece", sigue la declaración pública.

Trasante no dejará la organización. "El protocolo, que ya ha sido implementado en otras ocasiones, prevé acompañamientos en los dos extremos del caso. Por eso tanto Eduardo como la persona denunciante tendrán un proceso de retrabajo con compañeros y compañeras para poder tramitar la situación de la mejor manera. El protocolo no tiene una visión punitivista, sino que apuesta a mecanismos de trabajo político y colectivo de deconstrucción", afirman. Por eso, "Eduardo seguirá aportando en otro espacio de Ciudad Futura mientras dure el proceso. El protocolo es todo lo contrario al linchamiento y no busca empujar a nadie al vacío, porque el feminismo no es un salto al vacío. El feminismo no es solo la impugnación de este mundo, sino la posibilidad un mundo mejor".