La inflación fue la más elevada en 27 años. La promesa de Mauricio Macri candidato acerca de lo fácil que sería bajar la inflación está lejos de cumplirse. El ex presidente del Banco Central Federico Sturzenegger aseguraba que la política monetaria estaba por el camino correcto y que 2018 iba a marcar la inflación más baja en décadas. “La principal función del Central es que se cumplan las metas de precios. La implementación de estas metas es sencilla. No tiene mucha complejidad”, decía. El Central había fijado primero la meta de 2018 en 10 por ciento (ver foto) y luego, por presión del Poder Ejecutivo, la elevó a 15. La inflación terminó siendo más del 47 por ciento. 

“Será de por sí un logro que la inflación sea este año la mitad del año pasado. Y esperemos que sea la mitad de este año el año próximo, y que lleguemos a un dígito en 2019”, decía a mitad de 2017 el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne. “El proceso de desinflación es realmente muy sólido”, aseguraba a fin de ese año. El jefe de Gabinete, Marcos Peña, aseguraba en ese mismo momento, cuando se pasó del 10 al 15 por ciento la meta 2018, que “cambiar las metas no implica aceptar que haya más inflación”. Los datos duros fueron a contramano de los deseos de los funcionarios. Hubo casi 35 puntos más de inflación respecto de los pronósticos oficiales.

Hace varios años que Macri viene asegurando que controlar el proceso inflacionario es una tarea menor. “La inflación es la demostración de tu incapacidad para gobernar. En mi presidencia la inflación no va a ser un tema”, decía en 2015, año de la campaña electoral. Las declaraciones de este tipo se escucharon repetidamente. “La inflación se produce por culpa de un gobierno que administra mal. Si la inflación no baja, va a ser responsabilidad de mi gobierno”, aseguraba. El fallido del Presidente fue mayúsculo. “Eliminar la inflación será la cosa más simple que tenga que hacer si soy presidente”, planteaba. Dijo incluso que “cuando yo veo que el 99 por ciento de los países del mundo tienen inflaciones de un dígito, si nosotros no entramos en ese grupo de países, vayámonos a la casa”.