El universo del streaming se sigue agitando: Apple anunció oficialmente el lanzamiento de tres señales que ofrecerán contenidos de ficción y noticias. En una de sus clásicas presentaciones de productos nuevos, en el Steve Jobs Theater de Cupertino (California), ejecutivos y estrellas del cine y la TV le dieron la bienvenida a Apple TV+, un sistema de suscripción que presentará series originales; a Apple TV Channels, que permitirá ver a través de su plataforma otros canales; y a Apple News+, enfocado a las noticias y artículos provenientes de medios gráficos. Si bien no dieron una fecha precisa de lanzamiento, estimaron que será en el otoño boreal.

De esta manera, la empresa de la manzanita sale a competir fuertemente con Netflix, Amazon y la inminente Disney+, servicios de streaming que vienen concentrando la manera imperante de consumo audiovisual en el nuevo siglo. No se trata solo de abarcar una parte de la torta, sino también de las limitaciones que está empezando a encontrar Apple en lo que era su atractivo principal: aunque no lo reconocen en voz alta, los ejecutivos vienen manifestando su preocupación por el amesetamiento de la venta de hardware. El público parece hoy más interesado en la diversidad de contenidos que en la diversidad de aparatos.

Según lo anunciado, en Apple TV+ habrá platos fuertes como The Morning Show: Reese Witherspoon, Jennifer Aniston y Steve Carrell estuvieron en el escenario para presentar una serie que girará alrededor de “las complejas relaciones entre hombres y mujeres en su lugar de trabajo” (¿alguna similitud con The Office, quizás?). Jason Momoa, una estrella de proporciones tras su paso por Game of Thrones y Aquaman, presentó junto a Alfre Woodward una serie llamada See, mientras que Sara Bareilles y J. J. Abrams hablaron de Little Voices, una dramedy con alto protagonismo de la música. En un momento de alta exposición del tema en Estados Unidos, el comediante pakistaní Kumail Nanjiani anunció Little America, una serie en episodios de media hora sobre historias de inmigrantes en el país. Oprah Winfrey, indiscutible peso pesado de la TV estadounidense, desfiló para señalar que elabora junto a Apple una serie de documentales sobre lugares de trabajo y salud mental. 

La presencia quizá más sorprendente fue la de Steven Spielberg, quien en un mensaje grabado en video (el mismo sistema utilizado por el cineasta M. Night Shyamalan) manifestó su apoyo a la nueva plataforma y sus proyectos de producción original. Spielberg mantiene desde hace meses una pública polémica con el formato de streaming, y con Netflix en particular, indignado por el protagonismo que el servicio alcanzó en la última entrega de los Oscar.

Además de su servicio de producción propia, Apple ofrecerá TV Channels, con contenidos de HBO, Hulu, DirecTV, Spectrum y FuboTV. La idea, según dijeron los ejecutivos, es “unificar tus shows favoritos, películas, deportes y noticias” en un solo lugar. La versión Channels podrá verse en computadoras y Smart TV, y aunque en principio estará disponible en solo diez países planean expandirlo a 100 en los meses siguientes. Por último, Apple News+ ofrecerá, por 9,99 dólares mensuales (fue el único precio anunciado), un compilado de artículos y noticias derivados de diarios, revistas y sitios web que, según indicaron, de tener que adquirir por separado significarían un gasto de 8 mil dólares al año.

La gran ausente en los anuncios fue Apple Music, que en principio no estará integrada a ninguno de estos servicios: en un momento en que Spotify y YouTube Music llevan la voz cantante del negocio, la plataforma musical iTunes debió encontrar la manera de resolver un error de cálculo que llevó a la compañía a apegarse al sistema de download, cuando ya estaba claro que el público empezaba a inclinarse por el streaming, evitándose la preocupación por tener dispositivos con gran capacidad de alamcenamiento. En los últimos dos años Apple fue modificando su estrategia y concentrándose también en el streaming, pero –curiosamente para un producto del imperio Jobs– quedó detrás en la carrera por las sucripciones musicales.