Si es cierto que una ciudad termina de definirse por la gracia y la energía de sus costumbres, seguramente Jazzología ocupa un lugar importante entre los bienes de Buenos Aires. Hoy a las 20.30, en la sala Enrique Muiño del Centro Cultural San Martín (Sarmiento 1551), el ciclo de jazz creado hace 35 años por el periodista Carlos Inzillo comienza una nueva temporada. Un año de aniversario redondo que, además de festejar la música y las buenas costumbres que la circundan, será la celebración del apreciado y poco común don de la continuidad. “El primer sorprendido soy yo. Que un ciclo de jazz en un ámbito estatal cumpla 35 años es algo inusual”, dice Inzillo al comenzar la charla con PáginaI12. Protagonista de la noche de apertura será Oído Obsoleto, un grupo onda New Orleans de los años ‘20. Federico Correa Louzao (tuba), Catriel Diringuer (washboard y accesorios), Federico Russo (banjo), Leonel Hitters (trompeta); Paloma Schachmann  (clarinete); Agustín Salesses (saxo barítono) y Agustina Ferro (trombón), conforman la banda que con instrumentos originales exalta los sentidos del swing del jazz tradicional. Las entradas son gratuitas y se entregan desde dos horas antes del concierto, en el mismo centro cultural porteño. 

Batallador pertinaz de las causas jazzísticas en los desconciertos de la difusión musical, Inzillo destaca que Jazzología comenzó en épocas del reverdecimiento de la democracia en la Argentina. “El primer concierto fue el martes 4 de setiembre de 1984”, enfatiza el difusor. “Ese no es un dato secundario, porque por entonces se vivía un clima de gran entusiasmo y la cultura jugó un papel fundamental en aquella transformación. En Buenos Aires, el San Martín era una referencia importante, con muchísimas actividades y una gran convocatoria de público. Y fue una gran cosa que haya incorporado al jazz”, destaca.

Hernán Oliva, el inolvidable violinista, fue el primero de la inmensa lista de jazzistas que pasaron por el ciclo. Un elenco en el que resulta más breve destacar eventuales ausencias antes que enumerar las numerosas presencias. “Hubo uno que me faltó. El Gato Barbieri fue durante mucho tiempo mi asignatura pendiente y ahora, claro, es imposible”, se lamenta el artífice del ciclo que con el de esta noche llagará a 2151 conciertos. Pero Inzillo no adopta el término “conciertos” y prefiere hablar de “reuniones”. “Es que todo comenzó con ese espíritu. La declaración de principios de Jazzología fue convocar a reuniones semanales. Pensamos que debían ser los días martes, porque junto con el lunes eran el días en que generalmente los músicos no trabajaban y entonces tenían disponibilidad”, explica. 

Divulgar el jazz en todas sus expresiones es otro de los principios de Jazzología desde su creación. “Desde el rag hasta las vanguardias, digamos. Trato de alternar para satisfacer el gusto de todos, aunque el ciclo tiene un público propio, que ya viene a todas las reuniones más allá de quien toque, y ese es nuestro gran capital”, asegura Inzillo. “Yo venía de militar en el Círculo Amigos del Jazz, que albergaba los estilos clásicos y modernos. Antes, las cosas estaban muy divididas entre los jazzistas tradicionales y los modernos, entre el Hot Club y el Bop Club respectivamente. De todas maneras, parece que las diferencias no eran tan marcadas. El Mono Villegas o Jorge Navarro me contaban que ellos iban a tocar a los dos clubes, y tanto en las reuniones de uno y de otro tocaban lo mismo. Y nadie les decía nada. Eran esos disparates de aquellas épocas, en el que las instituciones eran realmente clubes, porque aunque se perdía guita el tema era poder desarrollar esta pasión”.

“Hoy se produce mucho y muy buen jazz en Buenos Aires y programar con equilibrio es siempre un desafío”, advierte Inzillo. Julia Moscardini (el 16 de abril), Juan Cruz de Urquiza (el 30, que es el Día Internacional del Jazz) estarán en la continuidad del ciclo que para este año proyecta entre otras cosas la celebración de los veinte años de Escalandrum. “Es uno de los grandes grupos de jazz de la actualidad. Conozco a Pipi Piazzolla y a los muchachos desde sus primeros pasos, y es un halago que vengan al ciclo”, dice. Américo Belloto y Ángel Sucheras con un homenaje a Louis Armstrong; Panchito Nolé y su trío (llegarán desde Montevideo); Livia Barbosa y Fili Savloff con el espectáculo Días de vino, rosas y ... Henry Mancini; el regreso a los escenarios de la Delta Jazz Band; el encuentro entre dos contrabajista formidables como Alfredo Remus y Pablo Mottta; un homenaje a Elis Regina por la brasileña Cassia Pereira; y la Jazz Believers Orchestra con The Atomic Basie, figuran en la lista de este año. También se prepara en el marco de este ciclo el Festival Internacional Django Argentina 2019, una idea de Ricardo Pellican de la que participarán entre otros el Hot Club de Piracicaba de Brasil, el Flash Trío de Chile y el francés Jean Louis Carlotti.

Oferta musical de calidad con entrada gratuita, en un día en el que hay poca competencia, en un escenario como la sala Muiño. Inzillo explica que esas podrían ser algunos de los factores que consolidaron a Jazzología “Está también la calidez y la pasión de un equipo que trabaja con la camiseta del jazz puesta. Los artistas vienen por el corazón a un espacio de jazz. Porque puedo asegurar que por la guita... no vienen por la guita”, concluye.