Como encargada del legado de su padre, Shannon Lee contrató a un archivista “que está en proceso de catalogar y preservar todos sus efectos personales”. Según la productora ejecutiva de Warrior, el núcleo del archivo son los textos de Bruce Lee, entre los cuales hay tratamientos para series y películas, y hasta un guión completo. “Todos están ambientados en distintos momentos, pero son vehículos de acción y artes marciales porque los imaginaba para él. Todos exploran en algún nivel el viaje filosófico de un artista marcial y lo que eso significa. Así que hay más proyectos que esperamos desarrollar”, dice. Pero no es lo único que se conserva de la estrella de las artes marciales, actor, cineasta, filósofo y escritor estadounidense de origen chino: “Hay fotos, su colección de libros –que son miles–, y también efectos personales como equipo de entrenamiento, ropas, armas, videos de box, revistas... Es un archivo bastante grande. No es todo lo que ha existido, pero es mucho. Estamos en el proceso de prestar activamente a museos. No tenemos nuestro propio museo... pero nunca se sabe, quizás en el futuro”, se ilusiona Shannon Lee.