Tras las once derrotas consecutivas en elecciones a gobernador, el Gobierno nacional salió a minimizar esos resultados. El encargado de hacerlo fue el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, quien aseguró que demuestran que “independientemente del color partidario, que lo que se está discutiendo son cuestiones locales, tanto a nivel provincial como municipal”. Eludió una lectura nacional de los resultados. En tanto, el funcionario aseguró que la fórmula presidencial y la conformación de las listas se van a hablar con “el resto de los socios” de Cambiemos. 

Tras la reunión de gabinete, Frigerio intentó calmar las ansias en torno a la discusión del vicepresidente, que deberán encarar con la comisión formada para negociar en la última Convención de la UCR, que dispuso continuar en Cambiemos pero exigir que la alianza se amplíe y discutir las listas. Tras una semana de esa convención, en la Rosada no tienen fecha para una primera reunión con los radicales. Frigerio dijo que será “seguramente en estos días”. La comisión la encabeza el titular de la UCR y gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, quien tiene una relación ríspida con el jefe de Gabinete, Marcos Peña. Frigerio resaltó que en la Convención “se ratificó la pertenencia de ese partido a Cambiemos en una votación más contundente aún que la de Gualeguaychú hace cuatro años, es decir, que hemos fortalecido a nuestro espacio”.

“Todavía hay tiempo hasta el 22 de junio para presentar las candidaturas, sea la fórmula presidencial como la de las listas a legisladores nacionales en las distintas provincias”, buscó calmar los ánimos Frigerio. E insistió en que serán discutidas “con el resto de los socios”. 

El Gobierno se ha mostrado abierto a discutir la fórmula presidencial (aunque siempre aclaran que la última decisión estará en manos del presidente Mauricio Macri). En cambio, son reticentes a que le compitan al mandatario en las PASO nacionales. Sobre las internas en las provincias, Frigerio dijo que “la posibilidad de tener las PASO se va a definir en cada jurisdicción”, pero aclaró que “obviamente vamos a intentar que haya los mayores acuerdos posibles, pero si esto no ocurriera, las PASO son un buen mecanismo para dirimir a quienes mejor representan a nuestro espacio”.

“En algunos lugares vamos a llegar a un acuerdo, y en otros están estas herramientas, no vemos un problema en eso”, insistió Frigerio.

Sobre las once elecciones provinciales en las que fue derrotado Cambiemos (y las cinco que se vienen este domingo), Frigerio intentó evitar una lectura nacional e insistió en que se discuten “temas locales”. “Son todas locales y en consecuencia no es algo que nos vaya a sorprender respecto de lo que viene pasando en las anteriores, aunque obviamente esperemos que gane Cambiemos, pero no son comicios a nivel nacional”, insistió sobre las elecciones de este domingo en Jujuy, Tucumán, Entre Ríos, Chubut y Tierra del Fuego y las PASO en Mendoza.  

La estrategia de Macri en enero había sido buscar que la mayor parte de las elecciones se hicieran en octubre con las nacionales, una idea que no apoyaron ni los aliados radicales (Corrientes eligió legisladores radicales el domingo pasado, Jujuy elige el que viene y Mendoza tiene sus PASO). Solo los macristas Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal unificaron las elecciones, esta última lo hizo pese a un debate interno para desdoblarlas que fue sepultado por la cúpula del PRO.

Pese a esto, Frigerio consideró que los desdoblamientos son “positivo para la democracia, porque claramente desdoblar una elección no es gratis, las provincias tienen que invertir mucho dinero de los contribuyentes al desdoblamiento, y es esperable entonces que sirvan para discutir temas de interés de la población, como salud, educación, obras públicas, seguridad, justicia, todas responsabilidades de las provincias”.

De todas formas, el ministro del Interior consideró que el debate en las elecciones distritales “tampoco es independiente de lo que ha hecho a favor de las provincias el gobierno nacional”, que “con mucho esfuerzo, les ha ido devolviendo recursos que les pertenecen, a diferencia de otros gobiernos, y hoy por suerte la Argentina puede mostrar cuentas públicas de los estados provinciales saneadas”. “Nosotros hemos encontrado el 10 de diciembre de 2015 estados provinciales quebrados, que no podían pagar los salarios, mucho menos los aguinaldos de aquel momento”, aseguró el ministro. Al juzgar por los resultados de las once elecciones a gobernador, los votantes no valoraron a Cambiemos de la misma forma que lo hacen sus funcionarios.