"El sujeto como tal, definido por su lugar en el Otro, es un inmigrante. No definimos su lugar en lo Mismo porque sólo tiene hogar en lo del Otro", dice Jacques-Alain Miller en Extimidad. Del ENAPOL (Encuentro Americano de Psicoanálisis de Orientación Lacaniana" 2019 elijo tomar la pasión del odio, tal como lo vemos expresado en hechos de actualidad. Lacan ofreció una renovada mirada no sólo de la época sino de consecuencias a futuro en la perspectiva del avance de los discursos de la ciencia y capitalista, y entre otras consecuencias, de la segregación y el racismo. Las manifestaciones grupales virtuales o reales, conducidas por un nuevo triunfo de las religiones y de una progresiva derechización de discursos: "¿obedecen acaso a la tentativa de restituir al Otro?", es una pregunta que puede leerse en la página de Enapol (https://ix.enapol.org/es/argumento-2/) Resalto esta pregunta del argumento.
Este ENAPOL avanza en la orientación de los anteriores y recoge la indicación por no distraernos de los efectos causados en las subjetividades. Comentaré en algunos trazos la problemática de una joven proveniente de un circuito de poder económico y si bien religioso, más creyente que practicante.
"Nada es imposible", sería un lema que corresponde al abanico de acceso a infinitas posibilidades. Este campo inconmensurable le impide optar, resultando que no hay lugar para la pérdida. Una elección en el amor se impone. Uno es elegido haciendo límite a su sin medida. Sin embargo, ella sabrá reservar una economía libidinal al servicio del amor al padre en quien cree religiosamente.
De su relato se escucha un punto fijo perturbador que no cede. Se refiere a una figura familiar cercana de la que dirá: "Nacimos muy próximas". El odio y el deseo de muerte poseen una vitalidad notable. Aquella encarna a quien porta las insignias de belleza del ideal de La mujer. Dócil y compatible a la familia tradicional de la cual nuestro sujeto procura separarse.
La intensidad del odio la sume tanto en la furia como en la culpa. En consecuencia, se presentan perturbadores pensamientos a modo de castigo. La lucha por conquistar miradas de reconocimiento la lleva a sacrificios inútiles. Se presenta en el "próximo" (¿prójimo?) un punto de real. Los pensamientos la obsesionan y la angustia da cuenta de su posición de deshecho. La otra la eclipsa opacando sus logros y su satisfacción.
Miller plantea en su texto Extimidad, que la intolerancia al goce del Otro se produce en la medida en que se le supone que es quien sustrae el propio. "Este robo de goce lo abreviamos escribiendo -fi, matema de la castración", dice J.-A. Miller. También nos ha orientado a inscribir el odio entre imaginario y real. "En el odio al Otro que se conoce a través del racismo es seguro que hay algo más que la agresividad. Hay una consistencia de esa agresividad que merece el nombre de odio y que apunta a lo real en el Otro". Me interesa subrayar el aspecto de 'consistencia' que apunta a lo real en el Otro. Es el Otro dentro de mi, raíz del racismo: el odio al propio goce que el semejante extranjero presentifica.
El triunfo de las religiones y de una progresiva derechización de
discursos ¿obedecen acaso a la tentativa de restituir al Otro?
Desapegarse de la potencia de la mirada abre la posibilidad de diluir la creencia en el Otro y en esa medida, el servilismo a esa mirada. Operación que no es posible sin que la barra de la castración caiga sobre el dios padre y La mujer. Transgredir el programa de goce tiene efectos que retornan sobre el sujeto: lo podríamos nombrar, un racismo familiar.
Un afecto de segregación. ¿Podríamos arriesgar que esto la participa de otra lengua? ¿La vuelve extranjera de ese Otro?
El horizonte del no-hay da lugar al deseo singular y la anima al encuentro con el partenaire, más libre de pensamientos. Aunque, de tanto en tanto, se hace escuchar el afán por restituir al Otro su consistencia.
El analista encarna ese Otro de la transferencia cuya posición está hecha esencialmente de objeto a. Su función de extimidad se orienta a producir una reversión necesaria: el pasaje de la consistencia supuesta al Otro a la consistencia lógica del objeto a. Supone el trabajo de vaciamiento de sentido y el concomitante acceso a un deseo singular.
*EOL. dwolodarsky@gmail.com