La cantidad de puestos de trabajo no registrados se ubicó en 4.787.000 personas en el primer trimestre de 2019. Se trata de un incremento de 177 mil individuos respecto de igual período del año pasado. Así lo publicó ayer el Indec. La precarización laboral es una de las principales consecuencias de la crisis económica junto con la caída del poder de compra de los asalariados. En el sector público se registraron 3.498.000 trabajadores, contra los 3.482.000 empleados del primer trimestre del año pasado. Por su parte, en el sector privado registrado se anotaron 7.213.000 ocupados, cuando habían sido 7.291.000 en el primer trimestre del 2018. Esto implica que en el sector privado se perdieron 78 mil puestos de trabajo registrados. El informe del centro de estadísticas oficial pone en evidencia el fracaso del modelo económico. Subió el empleo público, que los funcionarios del Gobierno aseguran que es improductivo, mientras que bajó el empleo registrado privado y aumentó el trabajo no registrado, es decir la precarización laboral.