Poco más de cuatro horas después del cierre de la votación y sin datos oficiales por la demora en el escrutinio provisorio, el presidente Mauricio Macri salió a reconocer que fue derrotado por el Frente de Todos que encabezan Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner. Nootablemente golpeado. “Hemos tenido una mala elección y eso nos obliga a partir de mañana redoblar los esfuerzos para octubre”, resaltó el mandatario desde el búnker de Costa Salguero.

Macri alegó que los resultados, que todavía no brindó a la población, responde al “nivel de dificultades enorme que tuvimos que enfrentar, lo que ha llevado a que haya mucha angustia, mucha duda”. “Estoy acá para ayudarlos porque amo este país”, insistió el presidente, quien ponderó el trabajo de los “defensores del cambio”, que no alcanzó para superar a Fernández-Fernández.

En esa línea, y ante los rumores de una potencial derrota de María Eugenia Vidal en la provincia de Buenos Aires agregó: “esperemos que en octubre los bonaerenses no se pierdan a Vidal”. También se refirió a la victoria de Horacio Rodríguez Larreta en la ciudad, el único que logró buenos números de todo el frente de Juntos por el Cambio. “Ahora a dormir”, cerró su breve interlocuciòn el mandatario, con signos de cansancio y pesar.