El Banco Central anunció este jueves una nueva medida para intentar calmar el mercado cambiario. Redujo al 5 por ciento el tope de tenencia de billetes en moneda extranjera que pueden tener los bancos. Esto no afecta a los depósitos de los clientes sino que impacta en los activos propios de las entidades bancarias. La medida empezará a regir a partir del 20 de agosto y podría aumentar la oferta de divisas en la plaza.

La normativa busca controlar la cantidad de billetes líquidos que los bancos mantienen en moneda extranjera. La posición general de cambio (activos dolarizados de las entidades) incluye las tenencias de dólar futuro y otros derivados. Pero en esta regulación sólo se apunta a limitar el saldo diario de billetes en moneda extranjera.

La estrategia pretende incrementar la cantidad de dólares ofertados en la plaza cambiaria. En los últimos días -por la incertidumbre financiera- fueron pocos los inversores que se decidieron a vender divisas y eso aceleró la devaluación del peso.

El lunes fue el ejemplo más claro de los problemas de volatilidad que genera un mercado cambiario tan chico como el argentino. Se operaron solamente 500 millones de dólares: una cifra bastante inferior respecto de los promedios diarios de 800 millones. Pero con eso fue más que suficiente para generar un salto del dólar de 25 por ciento.