A más de un mes de la devaluación posterior a las PASO, la fuerte suba del dólar sigue teniendo efecto en la inflación minorista. Fuentes del renglón comercial informan que empresas proveedoras de productos de consumo masivo lanzaron nuevas listas de precios con subas del 15/16 por ciento en promedio para aplicar en octubre de marcas como Taragüí, Azúcar Ledesma, Sancor, Coca-Cola, Danone, Elite, Babysec, Quickfood, Head & Shoulders y Pantene, entre otras. Especialistas explican que se trata de subas de costos que estaban pendientes de traslado al consumidor, aunque advierten que las empresas también pueden estar buscando protección de cara a un probable acuerdo de precios-salarios de parte del próximo gobierno en un contexto de incertidumbre cambiaria. En este escenario de precios en ascenso de los productos esenciales junto a la suba de la nafta, la estimación de inflación de 2019 va del 55 al 60 por ciento, por arriba de los tres años previos de la gestión de Mauricio Macri. Encima, Cambiemos deja inflación contenida en la canasta básica por la rebaja temporaria del IVA, en combustibles por el congelamiento y posterior ajuste parcial del precio de la nafta, y en electricidad, gas y transporte, por los aumentos de tarifas postergados.

La desatada inflacionaria posterior a las PASO motivó que el índice de precios al consumidor (que se confecciona con el promedio de precios a lo largo del mes) se ubicara en agosto en el 4 por ciento. Sin embargo, los precios mayoristas que se miden a la salida de la fábrica picaron hasta el 11,2 por ciento, lo cual elevó la inflación en ese segmento hasta el 62,9 por ciento en doce meses. La brecha frente a la suba de precios minoristas del 54,5 por ciento implica una inflación que espera ser trasladada a las góndolas en función del contexto del consumo en el mercado interno.

“Veníamos calculando una inflación del 4,7 por ciento para septiembre, pero probablemente termine ubicándose en el orden del 5 por ciento. En alimentos, las grandes cadenas de supermercados no muestran aumentos tan grandes como los esperados a raíz de la eliminación temporaria del IVA, aunque hubo fuertes subas en algunos productos. Otro rubro con importantes aumentos fue indumentaria, influido por recambio de temporada, mientras que en salud hay tanto suba de las cuotas de las prepagas como fuerte inflación en medicamentos a causa de la devaluación”, explicó a este diario Santiago Taboada, del estudio Orlando Ferreres.

Mientras prácticamente todo el abanico de los precios se movió al calor de la devaluación de agosto, el capítulo de alimentos y bebidas tuvo una dinámica propia dada por la rebaja a cero por ciento de la alícuota del IVA hasta fin de año. La medida permitió amortiguar el impacto de la suba de los precios en el bolsillo del consumidor, aunque  también da cierto margen a las empresas para que mejoren su rentabilidad sin quedar tan expuestas en las góndolas. A ese elemento se suman otros factores que explican las nuevas listas de precios para octubre. Por un lado, la apertura de la brecha cambiaria, con un dólar paralelo que cotiza a unos 65 pesos, alimenta expectativas de inflación. Asimismo, la creciente posibilidad de un acuerdo precios-salarios con congelamiento de precios por un período de tiempo motiva a las firmas a crear un colchón de precios, se especula en el mercado. La inflación en alimentos en agosto en la comparación interanual es del 58,8 por ciento y terminaría el año al menos en ese nivel.

 

En ese sentido, fuentes del supermercadismo y de empresas mayoristas coinciden en que empresas proveedoras líderes enviaron avisos de nuevos aumentos para octubre del orden del 15/16 por ciento. Se trata de Danone, Establecimiento Las Marías (Taragüí, Unión, La Merced, Mañanita), Ledesma, Sancor, Bodegas Bianchi, Coca-Cola, Papelera del Plata (Elite, Babysec, entre otras), Quickfood, Procter & Gamble (Ariel, Oral-B, Pantene, Pampers, Head & Shoulders, Gillette, entre otras).