Ingenieros de la fábrica Boeing omitieron salvaguardas clave en el sistema de seguridad del avión 737 MAX que habían sido incluidas previamente en el sistema de un avión cisterna militar de la compañía. 

Se presume que esta diferencia en el sistema, denominado MCAS (Maneuvering Characteristics Augmentation System), causó los accidentes de Lion Air y Ethiopian Airlines que dejaron un saldo de 346 muertos. 

Según un artículo de The Wall Street Journal, la versión anterior del sistema dependía de múltiples sensores y tenía "una capacidad limitada para mover la nariz" del avión, mientras que la versión del MAX recibía información de un solo sensor y era más difícil de controlar para los pilotos. 

Por su parte, un vocero de Boeing sostuvo que los sistemas de los aviones cisterna y los 737 MAX “no son directamente comparables”. 

Desde marzo de este año, está prohibido volar con los 737 MAX.