Personal de la Policía de la Ciudad requisó los materiales que traían los utileros de River, apenas llegaron a la cancha de Boca, antes de la revancha por una de las semifinales de la Copa Libertadores frente a Boca. Con perros de la división Explosivos y Narcocriminalidad, los efectivos revisaron bolsos, valijas y demás elementos para certificar que no hubiera ningún elemento extraño.

Según informaron fuentes policiales, este mismo procedimiento se realizó con Boca en el "Monumental", en el encuentro de ida. Además, personal de la Agencia Gubernamental de Control inspeccionó la cancha y dio el visto bueno para la apertura, que fue a las 17.30. Se revisaron palcos, tribunas, vestuarios y las distintas dependencias del club en búsqueda de pirotecnia no autorizada y narcóticos. Y se inspeccionaron también puestos de comida, la cocina y los vestuarios locales, visitantes y de los árbitros.

En tanto, un equipo de Fiscales de la Ciudad de Buenos Aires estuvo abocado especialmente al operativo de seguridad en torno al Superclásico. El grupo estuvo coordinado por la fiscal penal y contravencional de la Ciudad Celsa Ramírez, y fue debido a los episodios de violencia anteriores que hubieron en los partidos que enfrentaron ambos equipos.

El equipo de cinco fiscales fue creado por el Fiscal General porteño Luis Cevasco y es "ante la serie de episodios de carácter penal y contravencional ocurridos con motivo de los recientes encuentros deportivos entre los primeros equipos de los clubes mencionados, ya sea en el trayecto, las inmediaciones e incluso en el interior de los estadios".