El intendente macrista de Morón, Ramiro Tagliaferro, no tuvo tiempo para asimilar la derrota del domingo en la que aspiraba a su reelección que ya afronta nuevos problemas antes de abandonar en diciembre el Palacio Municipal: ayer el Concejo Deliberante aprobó “la interpelación al intendente para que rinda cuentas de la situación sanitaria y la grave crisis que atraviesa el Hospital Municipal de Morón por la falta de insumos básicos y la restricción en la atención”, que fueron denunciados pública y penalmente por los trabajadores y profesional del hospital. Tagliaferro afrontó antes de la eleccción una causa penal por "incumplientos ed los deberes de funcionario pùblico" por el reparto de comestibles, chapas y colchones a cambio de votos.