Exjefe del Estado Mayor Conjunto Martín Balza sostuvo que “no hay dudas de que en Bolivia ha ocurrido un golpe de Estado” y calificó de “falso e inconsistente” los argumentos del gobierno nacional para negar ese hecho como tal. Además, advirtió que es “peligroso” el giro que Estados Unidos dio sobre Latinoamérica tras “aplaudir” el derrocamiento de Evo Morales.

“No hay duda de que en Bolivia ha ocurrido un golpe de Estado y eso no se puede negar”, puntualizó el militar retirado, a la vez que remarcó que lo que ocurrió en ese país “no va a tener ningún eco” en la cúpula militar de la Argentina.

Durante una entrevista por Radio Cooperativa, Balza calificó de “falso y totalmente inconsistente” al argumento del canciller Jorge Faurie, quien dijo que los hechos de Bolivia no fueron un golpe de Estado porque los militares no se hicieron cargo del poder. “En marzo de 1962, cuando se echó ignominiosamente” a Arturo Frondizi, “el que se hizo cargo de la Presidencia no fueron los militares, sino el vicepresidente segundo del Senado, José María Guido”, comparó el ex titular del Ejército.

En Bolivia, prosiguió, “hay una forzada acefalía” y “un estado de insurrección” producto “por ese golpe de Estado” gestado contra Evo Morales. También elogió al presidente electo Alberto Fernández por “tener una actitud diferente” respecto de Bolivia. “Es necesario seguir en la región y Bolivia con los valores democráticos afectados, recomponer la legalidad constitucional, asegurar el respeto a los derechos humanos, y evitar un baño de sangre”, recomendó.

En este sentido calificó de “peligroso al cambio de política de Estados Unidos” sobre Latinoamérica que, a través de un comunicado emitido ayer por la Casa Blanca, afirmó que ese país “aplaude al pueblo boliviano por exigir libertad y a los militares bolivianos por cumplir con su juramento no solo a una persona sino a la Constitución de Bolivia”.

Balza recordó que “en el pasado, todos los lamentables golpes de Estado lamentables que hubo en Latinoamérica, fueron consentidos y apoyados por los Estados Unidos”.

“Volver a eso es un fracaso más, sobre todo de la diplomacia regional”, afirmó el también ex embajador en Colombia y Costa Rica durante los gobiernos anteriores. “Dónde están el Mercosur, la OEA, la Confederación de Estados Latinoamericanos y el Caribe, el Grupo Lima, la ya convaleciente Unasur”, se preguntó.

Por otra parte, negó que las Fuerzas Armadas argentinas puedan responder positivamente a lo que él llamó “la arenga de (Donald) Trump”. En su criterio, tras “el último y definitivo” alzamiento militar de un sector del Ejército liderado por Mohamed Alí Seineldin, en diciembre de 1990, “quedó materializada la total subordinación de las Fuerzas Armadas a la Constitución y al poder civil”.