El cura Abel Eduardo Balbi está notificado para que aporte las muestras de ADN este martes a las 10 de la mañana en el Servicio Médico del Poder judicial de Metán.

Lo confirmó la jueza Patricia Rahmer quien tiene a cargo el juicio por filiación que inició Cristian Vizgarra, de 27 años, en la localidad de Joaquín Víctor González, en el departamento Anta en el sur de Salta. El joven quiere saber si el sacerdote es su padre.

La madre de Vizgarra falleció cuando él nació. El joven creció creyendo que su madre era su hermana y sus abuelos maternos, sus padres. Después le revelaron la verdad sobre su madre biológica pero no le informaron quien era el progenitor. Sin embargo, Vizgarra dijo que en el pueblo era señalado como el “hijo del cura Balbi” y por eso inició la causa por filiación con el defensor civil Virgilio Varela,  para confirmar o desechar esa versión.

El 2 de octubre de 2018 el caso recayó en el Juzgado Civil, Comercial, Laboral, de Personas y Familia a cargo de la jueza Rahmer. Balbi, a su vez, tiene como abogado defensor a Pedro Brizuela.

El cura no se presentó a las citaciones previas para la realización del ADN. La jueza Rahmer dijo a Salta/12 que éste aseguró que se presentaría ahora, sin embargo, su abogado no pudo asegurar que efectivamente lo haga este martes.

Consultado por este medio, Varela dijo que Balbi está notificado y debe aportar la muestra de mucosa yugal para el estudio de ADN. El abogado aseguró que si el cura no se presenta, será notificado para otra audiencia. 

Las pruebas de ADN de Vizgarra ya fueron tomadas, ahora faltan las de Balbi. Si el cura las aporta, serán remitidas a la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires que dirige el médico Daniel Corach y el resultado estará en alrededor de 20 días, aseguró Rahmer.

Corach es responsable de la realización de estudios de análisis de ADN para la Corte Suprema de Justicia de la Nación desde 1992 y además colabora con Poderes Judiciales de 10 provincias, entre ellas Salta. 

Pedofilia y trata de personas 

Respecto a Balbi, el Arzobispado de Salta ya dispuso apartarlo mediante una medida cautelar del ejercicio público del ministerio sacerdotal, aunque sigue siendo cura. 

El sacerdote afronta dos causas en la justicia ordinaria, una es el juicio por filiación y otra investigación se tramita en la Fiscalía Federal 2, a cargo de Eduardo Villalba, por supuestos delitos de pedofilia y trata de personas

Las acusaciones contra el sacerdote surgieron en 2018 y se vinculan con su estadía en el período de 1983 a 1991 en Joaquín Víctor González.