El presidente de la UEFA, el esloveno Aleksander Ceferin, calificó al VAR como un "desastre", y adelantó que desde Europa se propondrán cambios para la tolerancia del fuera de juego. "Un fuera de juego no puede ser por tener la nariz larga. Habrá que discutir una tolerancia de 10 o 20 centímetros", propuso Ceferin en una entrevista con el diario inglés "The Mirror", en la que admitió no ser "un fanático" del VAR, tal como manifestó días atrás su colega de la FIFA, Gianni Infantino.

"Nunca fui un gran fanático de esto. En estos días se vio que los asistentes ya ni siquiera se molestan en levantar la bandera. Ellos esperan, esperan y esperan. Algunos árbitros en Inglaterra, ni siquiera controlan y en Italia controlan durante media hora. Es un desastre", admitió el responsable del fútbol europeo.

Y, en este sentido, agregó: "¿Los jugadores? Ya no celebran los goles. Ahora esperan al VAR. Y como dije, las manos, nadie puede explicar qué es mano y qué no". A pesar de las críticas, Ceferin reconoció que el VAR ya está instalado en el fútbol. "No soy un gran admirador pero, desafortunadamente, si decidimos que ya no lo usamos, nos matan", concluyó.

Por otro lado, el entrenador argentino Mauricio Pochettino, que el mes pasado fue despedido del Tottenham Hotspur, en la Premier League inglesa, está en la mira del Arsenal y el Manchester United, según reveló la prensa británica. Pochettino, de 47 años, está abierto a escuchar ofertas y tanto Arsenal como Manchester United tienen deseos de contratarlo, según publicó el periódico The Sun.

Arsenal está buscando entrenador tras el despido del español Unai Emery, mientras que Sun Sport reveló que el entrenador noruego del United, Ole Gunnar Solskjaer, está con los días contados en Manchester United. El mayor inconveniente para Pochettino y los clubes que deseen contratarlo es que el ex jugador de Newell's deberá pagarle a Tottenham 15 millones de dólares si toma otro trabajo de la Premier League esta temporada.