Pese a la crítica de la Asociación de Docentes de Enseñanza Media y Superior (Ademys) y de la oposición, el bloque oficialista aprobó la creación del Legajo Único de Alumnos (LUA) para todas las instituciones educativas de gestión estatal y privada de todos los niveles, modalidades y orientaciones dependientes del Gobierno porteño. El legajo contendrá toda información del alumno o alumna que se considere relevante para su desarrollo educativo: su trayectoria académica, los datos correspondientes a la institución educativa en la que se encuentra y la información correspondiente a su grupo familiar.

El Legajo Único de Alumnos, aprobado con 36 votos a favor, 13 en contra y 7 abstenciones, será "un sistema informatizado de gestión y administración de datos de los alumnos de las instituciones educativas, desarrollado y administrado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires".

El argumento esgrimido por el oficialismo es que permitirá "agilizar y modernizar la administración y gestión de datos académicos y personales de los alumnos; y facilitar la producción y análisis de indicadores educativos sobre los alumnos".

Cuando se presentó meses atrás el proyecto, desde Ademys sostuvieron que "el verdadero objetivo de esta iniciativa es centralizar la información de lxs alumnxs para discriminarlxs por capacidades y de acuerdo a eso asignar las vacantes y las posibilidades de acceso a estudios futuros. Así, unx niñx que atravesó una escolaridad primaria "difícil" verá cercenadas sus posibilidades a la hora de acceder a la escuela secundaria".

Para los impulsores de la norma, el LUA "es una herramienta para realizar el seguimiento individual y grupal de los alumnos, habilitando un acceso rápido y claro a la información, favoreciendo intervenciones pedagógicas más ágiles y mejor dirigidas". También señalaron que las provincias de Salta, Misiones, Entre Ríos, Catamarca, Neuquén, Formosa y Tucumán ya implementaron el LUA en la administración de información del sistema educativo.