El presidente Alberto Fernández aseguró que el Fondo Monetario Internacional avala el proyecto económico que desarrolló el Gobierno. “El Fondo aceptó esa lógica de trabajo”, indicó el mandatario en un almuerzo cerrado que mantuvo con los empresarios más importantes del país. 

Frente a CEOs como Paolo Rocca (Techint), Luis Pagani (Arcor), Eduardo Elsztain (IRSA) y Cristiano Rattazzi (Fiat), dijo que el proyecto de ley que el Poder Ejecutivo envió al Congreso tiene como objetivo terminar con el hambre, pero además reactivar la economía. “Hagamos algo épico que nos reconforte como seres humanos, no que reconforte nuestros bolsillos”, reclamó. 

Apeló a que los empresarios inviertan y les anticipó: “En materia económica no pretendo tener un Estado intervencionista”. Ratazzi le devolvió que "va por el camino correcto, es angosto, pero en algunos meses podemos ver mejoras". El presidente de AEA, Jaime Campos, le agradeció la visita y reconoció que "no hay duda que la situación económica y social requiere de la participación plena de todos los sectores".

Fernández dedicó la primera parte de su discurso a detallar la gravedad de la situación económica y social. Mencionó que 4 de cada 10 argentinos están en el “pozo de la pobreza” y que el Estado puede llevar adelante un accionar limitado por la debilidad de las cuentas públicas. “El Estado vive una situación fiscal mucho más compleja de la que ustedes piensan. Solamente el Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses, con el que le pagamos a los jubilados, está conformado en un 70 por ciento por papeles del Estado. El Estado se financió con los recursos de los jubilados. Cuando planteamos un mayor esfuerzo a las empresas, al agro y a la industria, lo hacemos para reconstruir esas cajas que han quedado vacías”, aseguró.

El presidente asistió con el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, el secretario de asuntos estratégicos, Gustavo Béliz, y el ministro de Economía, Martín Guzman, a quien se encargó de elogiar. “No hace falta que lo presente, es un hombre de enorme inteligencia y capacidad de lectura de la realidad”, afirmó. 

Contó que con Guzmán armó el plan económico y mencionó el concepto preferido de los ejecutivos: “El plan es sustentable, no es para salir de la coyuntura con la alegría del fin de año, sino para ver el mediano y largo plazo”, afirmó. En este sentido, adelantó que será el Consejo Económico y Social donde se crearán las políticas de largo plazo. Pero indicó que el mayor condicionamiento que afronta el país es el peso de la deuda, que representa el 95 por ciento del PIB. 

Para graficar la problemática, hizo referencia a un chiste que había hecho con el presidente de Fiat: “Le dije recién a Rattazzi, vos imagínate si te pido 10 millones de dólares para devolverte en un año. El sabe lo que yo gano, es imposible que me vaya a prestar. Igual, la verdad es que es imposible siquiera que me preste un sólo dólar”, afirmó, y despertó risas entre los comensales.

La broma fue utilizada para graficar el problema de la deuda y volver a criticar el préstamo del FMI, el más grande de la historia del organismo multilateral. “Por eso soy tan severo con el Fondo y lo hago corresponsable de lo que nos pasa. ¿Cómo le prestaron semejante cantidad de dinero a un país y dejaron que salga del sistema financiero graciosamente. Originalmente era para pagar deuda y lo que pasó fue que se terminó duplicando la deuda”, afirmó Fernández. En este sentido, comentó que le dijo al FMI que había que “cambiar la lógica” de ajuste. “Les dijimos que nos dejen construir un plan sustentable y sobre esa base acordar cómo pagarles. No vengan con el plan de siempre porque nos va a dejar en el lugar donde estamos. Y un dato saludable: el Fondo aceptó esa lógica de trabajo, no estamos improvisando”, aseguró.

Sin hacer referencia a las medidas instauradas, que no tienen el visto bueno del empresariado, como la doble indemnización por despidos, Fernández afirmó: “En toda decisión hay alguien que estará más contento y alguien más triste”. Pero por el contrario, dijo que Argentina está “en el fondo del pozo” y que el hambre debería “avergonzar” a la sociedad. Por otro lado, llamó a los empresarios a terminar con la grieta e hizo una referencia puntual a Clarín: “No podemos seguir perdiendo el tiempo peleándonos entre nosotros, es una lucha que tenemos que tomar todos, los empresarios, el campo, mi Gobierno y los medios Héctor… lo tienen que hacer todos”. Héctor Magnetto, CEO del Grupo Clarín, lo observaba desde la mesa más cercana al atril donde exponía Fernández. 

Los llamó a que “sigan invirtiendo y creyendo en el país”. Afirmó que las políticas económicas buscarán “reconstituir” el consumo y “proteger” a las empresas que producen y dan trabajo. Aclaró que el Estado no será “intervencionista”, sino que buscará equilibrar las desigualdades en los mercados. Adelantó que Vaca Muerta, la minería y el litio son temas “primordiales”, pero que el objetivo estará en dejar de exportar los recursos como materias primas, sino comenzar a venderlos con valor agregado. Le agradeció a Sergio Kaufman, que el lunes inaugurará una sede de Accenture que creará 400 puestos de trabajo. “Te voy a estar acompañando, porque quiero que todos sigan ese ejemplo”, lo elogió. Además, reveló una reunión que mantuvo con autoridades del banco Santander: Ana Botín (presidente) y Enrique Cristofani (presidente en Argentina). “Me contaron que trajeron 500 millones de dólares a Argentina para financiar exportaciones. Apostemos a eso, podemos y debemos hacerlo”, concluyó.