Eduardo “Wado” de Pedro, ministro del Interior desde el 10 de diciembre, compartió en sus redes la foto de uno de los primeros documentos de identidad que en el dorso llevan su firma. Junto a esta imagen, De Pedro subió el logo de Abuelas de Plaza de Mayo y, en un texto en el que no ocultó su emoción, expresó: “Por mi historia siempre entendí la identidad como un derecho. Hoy las vueltas de la vida hacen que sea el responsable de firmar los DNI de los argentinxs. Si tenés dudas sobre tu identidad comunicate al (011)43840983”, y lo acompañó con el hashtag “#LaIdentidadEsUnDerecho”. Un mensaje similar subió también en su página de Facebook, pero en esa oportunidad junto a una foto de la presidenta de la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto.

La historia del flamante ministro del Interior está ligada a la lucha por la identidad ya que su madre, Lucila Adela Révora, fue secuestrada el 11 de octubre de 1978 y según testimonios, asesinada junto a su pareja Carlos Guillermo Fassano durante un operativo llevado a cabo por un grupo de tareas formado por miembros del Ejército Argentino, la policía, el Servicio Penitenciario y Gendarmería Nacional, en su casa del barrio de Vélez Sarsfield. 

El grupo de tareas dejó a Eduardo, que en aquel entonces tenía dos años, al cuidado de unos vecinos. Esa noche, hombres que condicían un Falcon verde se presentaron ante esos vecinos diciendo ser tíos del nene, y se lo llevaron. Luego la familia de Révora pudo recuperar al niño. De ese modo De Pedro fue criado por su tía, Estela Révora y su marido Javier Ustarroz en la ciudad de Mercedes. De Pedro es uno de los jóvenes que fundó en 1997 la agrupación H.I.J.O.S.

El mensaje que escribió el ministro fue compartido por Abuelas de Plaza de Mayo: "Felicitaciones querido Wado y ojalá los próximos tiempos sean de muchos encuentros", escribió el organismo. Otros dirigentes como las diputadas nacionales Cecilia Moreau y Juliana Di Tulio, también festejaron la noticia. "Es uno de esos hechos que reparan el alma, gran alegría colectiva", escribió Di Tulio. 

El niño al que la dictadura cívico militar intentó robarle la identidad, es hoy el encargado de firmar los DNI que le dan identidad a miles de personas en este país.