Con la clasificación asegurada para el Mundial de Francia 2023 –una sede que le trae gratos recuerdos a Los Pumas– Argentina empezará 2020 en modo Jaguares. El techo del equipo quedó muy alto en 2019 porque fue finalista del Super Rugby. Ahora deberá revalidar el buen recorrido que tuvo, más allá de cuál sea su posición final. No resultará fácil y comenzará a saberse a partir del 1 de febrero cuando reciba a los Blues sudafricanos en Vélez. La selección, en cambio, esperará hasta la ventana de julio. Recibirá a Francia dos veces (4 y 11) y el 18 a Italia. 

Entre agosto y octubre se iniciará la competencia más seria para Los Pumas: el Rugby Championship con Sudáfrica, el campeón mundial, Nueva Zelanda y Australia. En noviembre los partidos amistosos confirmados serán contra Inglaterra y Escocia como visitantes. El seleccionado deberá ganar la mayor cantidad de test matches para subir en el escalafón mundial y buscar su punto de equilibrio. Quedó noveno después de Japón 2019 y la ubicación determinará a qué grupo puede ir a parar en la próxima Copa del Mundo.