Tras las intensas lluvias del sábado por la noche, los vecinos de Cafayate sufrieron el desborde de la cuenca de los ríos Chuscha de Cafayate y San Antonio de Animaná, por lo que debieron ser evacuadas más de 30 personas, en su mayoría turistas, y siete viviendas fueron dañadas por el ingreso de barro. Ayer ya habían retornado todos a sus respectivas viviendas.

Las familias afectadas están recibiendo alimento, agua y ayuda necesaria en sus domicilios. En tanto avanzan los trabajos de limpieza en distintos sectores con maquinarias especiales de diferentes organismos provinciales y municipales.

Las personas que sufrieron daños en viviendas y pequeños productores que perdieron sus animales de cría y huertas tuvieron asistencia psicológica y de contención.

En tanto la Policía continúa realizando trabajos de prevención en el puente del río Chuscha, en el acceso a Banda de Arriba, avenida Automóvil Club y en el acceso a la Banda de Abajo.

El secretario del Interior, Mario Cuenca, señaló que la situación está controlada y que se está trabajando junto al Ministerio de Hacienda para girar los fondos del Plan de Mínima, destinado a 40 municipios que para el periodo estival son afectados por las crecidas de los ríos.

Las rutas nacionales y provinciales se encuentran transitables con precaución. Las maquinarias de Vialidad Provincial, Vialidad Nacional, municipio y de organismos privados comenzaron las tareas pertinentes en zona del puente. Se habilitaron las calles anegadas, restableciéndose la circulación normal, solo continúan los trabajos de limpieza en calle Salta.

"El fenómeno se origina por las fuertes tormentas ocurridas en la alta cuenca del río Chuscha en zona montañosa, que movilizó un gran volumen de sedimentos de las laderas de los cerros. Estos sedimentos conformados por una mezcla de materiales finos y piedras de gran volumen, produjeron el taponamiento de puente de acceso norte de Cafayate" explicó el secretario de Recursos Hídricos Mauricio Romero Leal.

Aguas del Norte trabaja en Cafayate en la reparación de cañerías que fueron dañadas por la crecida del río Chuscha. Para evitar que la población se quede sin el servicio, se puso operativa una cañería del viejo acueducto. La medida se tomó porque la correntada estropeó las tomas sobre el río y se perjudicó la planta potabilizadora. 

En tanto, la Secretaría de Deportes de la Provincia recolectó donaciones de bidones de lavandina y detergente para la asistencia de las familias afectadas. 

Los barrios Banda de Abajo y Banda de Arriba fueron los más afectados por el temporal.  

La ministra de Salud, Josefina Medrano, se reunió en el hospital de Cafayate con el equipo de salud de la zona. El nosocomio trabaja en la prevención de gastroenteritis y posibles picaduras. Tienen cubierto el stock de medicamentos y tópicos locales para esa atención. Medrano también se reunió con el intendente local Fernando Alameda.

En cuanto al saneamiento, se releva la cantidad de animales muertos para retirarlos y enterrarlos en el vertedero. La Municipalidad, hospital y arzobispado entregan kits de limpieza, alimentos, agua mineral, calzado y ropa.

Protestas por falta de obras

Un grupo de vecinos de Cafayate se movilizó por la ciudad en reclamo por la falta de obras en el cauce del río para evitar los desbordes que sucedieron el sábado.

No es la primera vez que el curso de agua sale de control e invade la ciudad, y los cafayateños apuntan a lo poco profundo del cauce, por lo que la protesta solicita que, independientemente de la coyuntura y las obras que se hacen actualmente, el trabajado de cavado del río se ejecute durante todo el año, especialmente en la zona del puente y no esperar al verano cuando el Chuscha crece por las lluvias.

El problema el sábado tuvo su orígen en las fuertes lluvias que se dieron en la parte alta de los cerros y causó que el agua bajara con fuerza y trayendo mucha cantidad de barro, ramas y piedras que encontraron en el puente un obstáculo, convirtiendo ese sector en un dique que facilitó el posterior desborde.

Durante el reclamo de vecinos se registró un incidente cuando al marchar frente a la casa del intendente, a quien pedían que los atienda, pasó en su vehículo el secretario de Obras Públicas, que inmediatamente se convirtió en el objeto del reclamo.

El funcionario en su afán de irse del lugar atropelló a uno de los manifestantes que terminó hospitalizado con heridas leves. El vehículo fue interceptado por los otros vecinos que descargaron su furia rompiéndole los vidrios. 

Hoy anunciaron que volverán a concentrarse en el puente de ingreso a la ciudad y en la municipalidad hasta tanto sean recibidos por el intendente Almeda.