Irán negó categóricamente la posibilidad de que el avión ucraniano, que se estrelló el martes con 176 personas a bordo, haya sido derribado por un misil iraní como plantearon los gobiernos de Estados Unidos y Canadá. Ayer circuló un video donde se podía escuchar el lanzamiento de un supuesto misil que impactaba contra el avión minutos después del despegue.

El accidente, en el que murieron todos los pasajeros, en su mayoría iraníes y canadienses pero también británicos, suecos y ucranianos, ocurrió de madrugada, poco después de que Irán disparara misiles contra bases militares en Irak donde hay soldados estadounidenses.

Canadá y Reino Unido aseguraron el jueves que el avión, un Boeing 737, fue derribado por un misil iraní, probablemente por error, y se publicaron varios vídeos en las redes sociales que apuntan hacia esta tesis.

"Una cosa es segura, este avión no fue alcanzado por un misil", declaró sin embargo el viernes el presidente de la Organización de la Aviación Civil iraní (CAO), Ali Abedzadeh, en una rueda de prensa en Teherán.

El vuelo PS752 de la compañía Ukraine Airlines International (UAI) despegó de Teherán en dirección de Kiev y se estrelló dos minutos más tarde. Un vídeo de unos veinte segundos muestra imágenes de un objeto luminoso que sube rápidamente hacia el cielo y toca lo que parece ser un avión.

"Hemos visto algunos vídeos", dijo Abedzadeh. "Confirmamos que el avión estuvo en llamas durante unos 60 o 70 segundos" aunque, según él, asegurar que "fue alcanzado por algo no es correcto desde el punto de vista científico".

Tesis no confirmada

"La información en las cajas negras es absolutamente crucial para la investigación”, dijo Abedzadeh. "Cualquier declaración antes de que se extraigan los datos no es una opinión de experto", subrayó.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, indicó que se entrevistará con el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, el viernes después de que Kiev pidiera a los occidentales datos sobre la tesis del misil iraní.

"La tesis de un misil que impactó el avión no está descartada pero tampoco está confirmada", dijo Zelenski en Facebook. Unos cincuenta expertos ucranianos llegaron el jueves a Teherán para participar en la investigación y el análisis de las cajas negras del aparato.

Por su parte, un equipo canadiense de diez personas estaba "en camino", indicó este viernes Irán, para ocuparse de cuestiones relacionadas con las víctimas. La oficina canadiense de seguridad en los transportes aceptó una invitación de la autoridad de la aviación civil iraní para participar en la investigación.

Sólo algunos países del mundo, entre ellos Estados Unidos, Alemania y Francia, tienen la capacidad de analizar las cajas negras. El jueves Irán invitó a Boeing, el constructor estadounidense del avión, a participar en la investigación.

La agencia estadounidense de la seguridad de los trasportes (NTSB) anunció que Estados Unidos también participaría.

En Francia, la Oficina de Investigación y Análisis para la Seguridad de la Aviación Civil (BEA) indicó haber recibido un aviso oficial de Irán y "elegido un representante acreditado para participar en la investigación".

Se trata de la peor catástrofe de la aviación civil en Irán desde 1988, cuando el ejército estadounidense aseguró haber derribado por error un Airbus de Iran Air en el que murieron 290 personas.

También es el accidente más mortífero con presencia de víctimas canadienses desde 1985, cuando el atentado contra un Boeing 747 de Air India en 1985 mató a 268 canadienses.

"Tenemos información de fuentes múltiples" que indican que "el avión fue derribado por un misil tierra-aire iraní", dijo el jueves el primer ministro canadiense, Justin Trudeau. "No fue intencional", añadió.

Qué dijo la Unión Europea

La Comisión Europea pidió este viernes una "investigación creíble e independiente" del accidente aéreo en Irán, que Canadá y Estados Unidos atribuyen a un misil iraní.

"Todavía no hay pruebas concluyentes de lo que causó el incidente", aseguró el vocero europeo Stefan de Keersmaecker, calificando de "fundamental" que la investigación se lleve a cabo de manera "creíble e independiente".

El vocero abogó por "una investigación de seguridad civil independiente y creíble llevada a cabo de acuerdo con las normas de la Organización de la Aviación Civil Internacional" y mostró la disposición de la Unión Europea a ayudar en la investigación.