Kobe Bryant tenía cuatro hijas, pero Gianna Maria Onore, o simplemente Gigi, como se la conocía a la niña de 13 años que murió junto a su padre en el accidente de helicóptero en la ciudad de Calabasas, era su debilidad. Gracias a ella había vuelto a ver Los Angeles Lakers en el estadio, ya que la pequeña le había dicho que quería aprender de los grandes jugadores de la liga.

"Cuando me retiré dejé de ver la NBA, pero mi hija me dijo que quería aprender más sobre ellos. Desde entonces siempre procuramos ver partidos acostados en la cama, y cuando podemos, nos gusta ir a verlos en vivo", contó Bryant en una entrevista. Era común verlos a ambos sentados en la primera fila del Staples Center, donde el padre le explicaba a la hija cada detalle del juego. 

Gigi y Kobe Bryant, en uno de los tantos momentos felices que compartieron.

Jugadora de la Academia Mamba, la segunda hija de Bryant ya había ganado un torneo sub 16 con sólo 12 años. Su apodo era "Mambacita", en referencia al "Black Mamba" con el que se lo conoció a su padre. Los especialistas le auguraban un gran futuro, ya que mostraba destellos del talento de su progenitor. Como una mueca del destino, padre e hija, además de las otras siete víctimas, se dirigían a la Academia Mamba para una práctica de básquetbol cuando ocurrió el accidente.

También, gracias a la influencia de su famoso padre, la chica era capaz de conseguir fotos con las estrellas que visitaban a los Lakers, como ocurrió a fin del año pasado, cuando Gigi pudo tener su selfie con el esloveno Luka Doncic, después de un curioso cruce entre Kobe y el ex jugador del Real Madrid.  "Escuché a alguien que me estaba hablando en esloveno y pensé '¿quién habla mi idioma?'. Entonces giré y vi que era Kobe. Estaba muy sorprendido", contó Doncic sobre aquel saludo en medio del partido.

Además de sus condiciones naturales, Gigi tenía un profesor muy especial, ya que su padre se encargaba de mostrarle los secretos para conseguir grandes lanzamientos o imitar los movimientos que lo habían hecho famoso sobre una pista de básquetbol. El trágico accidente de este domingo truncó el sueño de ambos.