El ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, afirmó ayer que “Sancor tiene un problema de endeudamiento profundo que hace que el costo financiero sea altísimo”. Adelantó que se reunirá con autoridades de la cooperativa y también con representantes de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera (Atilra), aunque se mostró escéptico sobre las chances de encontrar una solución. El ministro aseguró que desde el Gobierno están dispuestos a colaborar, pero en la práctica no se observa voluntad política para facilitar soluciones a la crisis de la cooperativa, cuyo destino parece ser el de una futura venta.

“Sancor hace bastante tiempo que viene a los tumbos, con problemas financieros y con productores, pero en los últimos años los problemas han llegado a tal magnitud que en algún momento el Gobierno anterior pensaba venderle la empresa a Venezuela”, responsabilizó el funcionario. “Cuando nosotros asumimos lo que hicimos fue refinanciar un crédito que tenía de 250 millones de pesos con el Estado nacional y a su vez también le dimos un crédito nuevo de 250 millones de pesos, y a cambio le pedimos que se reestructure, que sea sustentable productivamente”, indicó. 

“La ayuda no significa poner 4500 millones de pesos. Nosotros no estamos planteando ninguna salida de Sancor. Esa es una decisión política de los cooperativistas de la empresa que no pasa por nosotros”, afirmó.