La Sala II de la Cámara Federal ordenó profundizar la investigación sobre los lazos del perito trucho David Cohen con el gobierno de Mauricio Macri. Desde la prisión, el ex subsecretario de Coordinación y Control de Planificación Roberto Baratta había analizado el entrecruzamiento de contactos telefónicos de Cohen, hoy camino a juicio oral por haber fraguado el peritaje en el que se basó la causa Gas Natural Licuado y la detención del ex funcionario.

Según logró determinar Baratta, la mano del gobierno de Macri estuvo detrás del perito que truchó el estudio que hablaba de supuestos sobreprecios. Así lo constata el listado de llamadas del teléfono celular de Cohen confeccionado por orden de la Justicia y estudiado por el ex funcionario de Planificación. Los registros dan cuenta de llamativas comunicaciones con la Casa Rosada, la quinta de Olivos, el Consejo de la Magistratura, el Congreso, oficinas de los tribunales de Comodoro Py y estudios jurídicos vinculados con el macrismo.

Los llamados se produjeron mientras el juez Claudio Bonadio y el fiscal Carlos Stornelli ordenaban la prisión preventiva de Baratta -hoy en libertad- y de su superior a cargo del Ministerio de Planificación, Julio De Vido, quien acaba de obtener el cese de su detención preventiva. Pese a que quedó demostrado que el peritaje que activó la causa de GNL fue trucho, ambos fueron a la cárcel por ese expediente cargado de irregularidades -entre ellas, una sospechosa declaración del falso abogado Marcelo D'Alessio, preso por espionaje ilegal, usada por Stornelli para reactivar un caso que se caía a pedazos-.

Baratta, querellante en el expediente contra Cohen, entregó en su momento a la fiscal Paloma Ochoa y al juez Sebastián Ramos un manuscrito de 44 páginas con el detalle de las dependencias públicas y las oficinas con las que el perito se había comunicado. Unas 150 planillas fueron investigadas por el propio Baratta y luego volcadas al informe entregado por sus abogados en Comodoro Py. En el texto señaló con lujo de detalles con quiénes se comunicó Cohen, qué antenas y celdas se activaron en cada caso, la duración y las fechas de cada llamado. Según consignó, todo ocurría mientras se ponía en marcha la causa por la que fue detenido.

Entre los llamados, resalta uno del 12 de abril de 2018. En esa fecha se registra una comunicación con la quinta de Olivos. Ese mismo día, la Cámara Federal aprobaba el pedido de prisión preventiva realizado por Stornelli. También destaca varios llamados con el estudio jurídico Tonelli, que tiene de clientes a Socma y a Yacyretá, entre otros. El ex funcionario recuerda que Pablo Tonelli representaba al oficialismo en el Consejo de la Magistratura y advirtió: “Que Cohen hable con su estudio es sospechoso, amoral”.

Ahora, en un rotundo giro respecto de su accionar durante el macrismo, el camarista Martín Irurzun le exigió al juez Ramos que haga un análisis a fondo de los lazos de Cohen con el Gobierno anterior. Además, le ordena que defina su competencia. Es porque Ramos le pidió a su par de Dolores Alejo Ramos Padilla que investigue el caso denunciado por Baratta, ya que el armado de la causa GNL figura en el expediente por espionaje ilegal.

A pesar de que el juzgado de Ramos estableció que el peritaje de Cohen fue totalmente trucho, la causa GNL siguió adelante. Tras el escándalo, Stornelli introdujo dos declaraciones de un testigo que reflotó la hipótesis de corrupción en la importación de gas. Ese testigo fue nada menos que Marcelo Sebastián D'Alessio.