Se confirmó en Chaco el primer caso argentino de coronavirus en un menor de edad. Se trata de un niño de cuatro años, residente de la ciudad de Resistencia, donde se encuentran todos los casos reportados hasta el momento en la provincia. Desde el Ministerio de Salud de Chaco precisaron que fue contagiado por un familiar que había viajado a uno de los países considerados como “de riesgo”.

A través de un comunicado, la cartera sanitaria de la provincia indicó que el niño “se encuentra en buen estado y en aislamiento domiciliario” y que recibe control desde el momento en que se le detectó el virus. "Se trata de un contacto estrecho de los primeros casos importados de coronavirus en Chaco", agregaron desde el Ministerio. Por otro lado, detallaron que el chico fue contagiado por una persona de su entorno, quien también tiene diagnóstico confirmado de coronavirus.

Según fuentes del Ministerio, el chico manifestó los primeros síntomas el pasado 7 de marzo y de inmediato fue puesto en cuarentena. Al niño se le extrajeron muestras para el examen de Covid-19 que fueron enviadas al Insituto Malbrán en Buenos Aires, y recién el pasado sábado la familia recibió la confirmación del contagio. El chico solo presenta síntomas leves y se encuentra fuera de peligro.

Hasta el momento, en el mundo han sido pocos los casos detectados de contagio en chicos. Si bien esta población está en condiciones de contraer el nuevo coronavirus, lo cierto es que la enfermedad afecta a niños y jóvenes en menor medida que a los adultos mayores. Según un informe de la misión conjunta de China y la Organización Mundial de la Salud, publicado a finales de febrero, únicamente el 2,4 por ciento de los más de 75.000 casos confirmados hasta entonces en China correspondía a menores de 18 años. De ese total, solo el 2,5 por ciento había desarrollado una forma grave de la enfermedad y el 0,2 por ciento una forma crítica.

En el mismo sentido, un estudio del Centro para el Control de Enfermedades de China, donde se analizaron 72.314 casos en territorio chino, concluyó que la tasa de mortalidad en niños de entre 0 y 9 años es del 0 por ciento, mientras que en el rango de 10 a 19 años, la tasa solo aumenta a un 0,2 por ciento. Recién en adultos de entre 50 y 59 años el promedio asciende al 1,4 por ciento y se eleva 14,8 por ciento en los mayores a 80 años.