"Cuando termino de pronunciar futuro, la primera sílaba ya está en el pasado". La frase de la nobel polaca Wislaba Szymborska alude al paso del tiempo pero también a la fragilidad quebradiza de todo proyecto. Desde lo cotidiano veíamos como pasaba la vida cuando un “bichito” diabólico irrumpió desbocado en una realidad paralela de estupor y de asombro.

El presente del Fútbol Club Barcelona también es un territorio para el asombro: asombro al cuadrado. A las dificultades de la pandemia se le ha sumado otro ente desintegrador de carácter emocional: el virus de la desconfianza. Siempre hay algo nuevo por descubrir en la entidad; un gesto; un detalle; un arrepentimiento; una crítica; una declaración a destiempo. El miedo al “otro” desdibuja la mirada, esa mirada que penetra, que delata, que acusa y debilita.

Al presidente del Barcelona, Josep María Bartomeu, se le ha instalado un infierno dantesco similar a la pandemia. No ha llegado por el aliento, ni por la saliva, sino por revelaciones de irregularidades cometidas por la empresa 13 Ventures, contratada por la entidad y dedicada a crear estados de opinión favorables a la actual junta directiva. A dicha compañía se le atribuye la creación de perfiles y cuentas falsas en redes sociales que se dedicaban a desprestigiar a personalidades críticas con la actual conducción, incluyendo al ex técnico Pep Guardiola, y, especialmente, a figuras del primer equipo como Leo Messi o Gerard Piqué.

La máxima autoridad azulgrana reconoció la existencia de dicha relación contractual, pero desmintió las acusaciones sobre posibles difamaciones a los futbolistas. "Me pareció un poco raro, veo extraño que pase una cosa así", declaró Messi.

La dimisión en bloque de seis de sus directivos y entre ellas la de Emili Rousand, el elegido por el presidente como posible candidato del oficialismo a las elecciones de 2021, cuestionó la honestidad del presidente. El directivo disidente insinuó en su salida que se metían, a falta de una, las dos manos en la caja. Sin reparar en las víctimas que dejaba por el camino su "vendetta" se interpretó como un secreto institucional extraviado bajo una heredada sucesión de silencios.

Un sector del Consejo estimó conveniente una rebaja del 70 por ciento de los sueldos de los jugadores con motivo del Covid-19. Las negociaciones filtradas a la prensa del rápido acuerdo llegado con otras secciones deportivas terminó por enfurecer al vestuario. "No deja de sorprender que desde dentro del club hubiera quien tratara de ponernos bajo la lupa e intentara sumarnos tanta presión", explotaba Messi.

Lo cierto es que determinadas palabras pesan, dejan huellas y a veces heridas. “Si seguimos así, nos haremos daño. Sabemos quien escribe las filtraciones, aunque las firmen otras personas” manifestó Piqué. El quiebre institucional se visualizó a lo grande en noviembre pasado con la ausencia absoluta del primer equipo en el estreno del documental Match Day, patrocinado por Rakuten TV, miniserie de ocho episodios con contenidos e imágenes exclusivas de los jugadores azulgranas. “Creo que no fuimos invitados", ironizó Busquests.

Los encontronazos vienen de largo, y los duelos verbales inagotables. "No sé si el barça ha hecho todo lo posible por fichar a Neymar", denunció Leo Messi ante la incorporación de Griezmann. "Con Valverde muchos jugadores no estaban satisfechos, ni trabajaban mucho", declaró el secretario técnico, Éric Abidal, protegido de Bartomeu, en una crítica despiadada al entrenador cesado en enero. “Cuando se habla de jugadores, habría que dar nombres porque si no se nos está ensuciando a todos y alimentando cosas que no son ciertas", matizó el capitán Messi.

Los humanos somos contradictorios y paradójicos, por eso la pureza monolítica del dogma es inhumana y falsa.

Bajo este cielo de incertidumbre el Fútbol Club Barcelona tiene el rostro girado hacia la súplica, hacia la plegaria. Nunca antes la frase tomó tanta actualidad: el fútbol es como la harina, alimenta al más tonto y ella sigue tan fina.

(*) Ex futbolista de Unión y Vélez, campeón del Mundial de Tokio 1979.