La agrupación Realizadores Integrales de Cine Documental (RDI), una de las pioneras en la Argentina, surgió hace doce años. Desde el sábado 27 de junio al jueves 11 de julio se podrá conocer su recorrido en el medio cinematográfico: se realizará el Foco RDI, que permitirá ver veinte documentales y dos ficciones de sus autores en exclusiva por OctubreTV, la plataforma del Grupo Octubre, que dirige Paula de Luque. Los miembros de RDI entienden su tarea de la siguiente manera: “Concebimos la producción cinematográfica como un proceso que no está separado de la realización del film. Es un acto único producir–filmar–dirigir. Este proceso nos define como sujetos, determina nuestra mirada, establece cómo recortamos esa realidad a retratar y nos da elementos concretos, tangibles para desarrollar el proceso creativo”. Esta toma de posición se refleja en sus producciones que abordan tanto temas históricos como actuales, como así políticos y sociales.

Uno de los films que podrá verse es La escuela contra el margen (2018), de Lisandro González Ursi y Diego Carabelli. La Escuela Manuel Mujica Lainez está ubicada en Lugano, a metros del Parque Indoamericano, el espacio público que fue tomado a fines de 2010 por más de 13 mil habitantes de la zona. Para liberarlo, se desató una feroz represión policial que concluyó con tres muertos. Ambos cineastas son docentes de un programa socioeducativo con el que les enseñan cine a estudiantes de escuelas de los barrios socialmente vulnerables. Así conocieron a la Mujica Lainez. Y producto de ese encuentro, realizaron este documental de una institución educativa que les permitió trabajar la conflictividad barrial y, a la vez, reflexionar sobre el problema habitacional a partir de lo que había pasado en el Parque Indoamericano. En la zona hay dos comunidades que, a veces, se enfrentan: los vecinos del barrio popular y los de los edificios. En el trabajo cotidiano entre una docente y sus alumnos que se ve en el documental, surgió la idea de hacer un mapeo colectivo para participar en un encuentro de Jóvenes y Memoria con otras escuelas, a realizarse en los hoteles de Chapadmalal. A través del taller que la docente propone se vislumbran los conflictos de esta zona socialmente vulnerable.

Otro documental sobre una escuela muy particular es Los sentidos (2016). El arquitecto y realizador Marcelo Burd viajó muchas veces al norte argentino por placer. Hace unos años, estaba interesado en realizar una película en la región de la Puna salteña. Después de recorrer distintos lugares de la zona, llegó a Olacapato, del que sólo tenía la referencia que es el pueblo más alto de la Argentina y que está cerca de la frontera con Chile. Se trata de un lugar bastante aislado, donde pueden verse casas de barro, muchas de ellas vacías, que apenas se vislumbran cuando el viento sopla y las cubre de polvo. Lo primero que se le ocurrió a Burd fue ir a la escuela del pueblo. Allí se encontró con el director y maestro Salomón Ordoñez, quien lo invitó a recorrer el predio. La primera sorpresa de Burd fue al ver una sala acondicionada como un estudio de radio, donde los chicos de 4º y 5º grado estaban haciendo un programa de radio sobre literatura mientras leían a Tom Sawyer, transmitían a los pobladores locales y los propios chicos manejaban la consola. Luego vio que los alumnos de 6º y 7º grado estaban editando con un programa semiprofesional un video que había sido registrado por ellos mismos. Después, el director le mostró una sala donde con una serie de telescopios profesionales: la escuela de Olacapato es una de las pocas del país que tiene una currícula orientada en Astronomía.

Hay una historia que se conoce. Es la del italiano Severino di Giovanni, quien emigró a la Argentina en los años ’20 para desempeñarse como obrero tipógrafo y que fue el anarquista expropiador más buscado en el Río de la Plata, durante los comienzos del siglo pasado. Osvaldo Bayer lo estudió con detalle y precisión en el libro Severino di Giovanni, el idealista de la violencia, que es un referente del estudio histórico de este hombre que fue fusilado por la dictadura de José Félix Uriburu, a los 29 años, cuando corría 1931. Pero hay otra historia que no es tan conocida: la historia de amor que entabló este joven de convicciones muy fuertes con una adolescente argentina y también anarquista: América Scarfó. Cuando se conocieron, ella tenía tan solo 14 años, y Di Giovanni, 27. No sólo se amaban, sino que se enamoraron de las ideas que cada uno defendía. Y eso consolidó la relación, a pesar de que se trató de un amor clandestino en más de un sentido. Esta es la historia que narra Los ojos de América (2014), documental realizado por Daiana Rosenfeld y Aníbal Garisto.

A veintiséis años de la desaparición de Raymundo Gleyzer, los realizadores Ernesto Ardito y Virna Molina dirigieron en 2002 Raymundo , un trabajo que narra la vida de uno de los nombres esenciales del cine político militante. A lo largo de más de dos horas de duración, el film establece un recorrido por la vida del fundador del Cine de la Base. Al mismo tiempo, su historia personal está inserta en el marco histórico-político de la América latina que le tocó vivir, hasta que fue secuestrado en mayo de 1976 por un grupo de tareas y al día de hoy continúa desaparecido. Pero el film también aprovecha para trazar una historia del cine revolucionario. Las imágenes se complementan con numerosos testimonios de familiares y compañeros de Gleyzer. Entre los que hablan figuran su esposa Juana Sapire, su madre Sara Aijen, los directores Nemesio Juárez, Dolly Pussi y Fernando “Pino” Solanas, el productor Bill Susman, Hugo Alvarez (actor de Los traidores), Alvaro Melian (coguionista y productor) y Nerio Barberis, de Cine de la Base. También hay imágenes y pasajes de sus películas y de su labor periodística: Gleyzer fue el primer cronista argentino en visitar las islas Malvinas y realizó una cobertura para Telenoche, que fue considerada el mayor impacto periodístico de 1966. También para el noticiero de Canal 13, en 1969 viajó a Cuba y fue el primer periodista en transmitir desde la isla luego de la Revolución. De la etapa del Cine de la Base, la película relata minuciosamente los métodos de producción de Raymundo Gleyzer y cómo era su trabajo en la clandestinidad.

Otro de los films del Foco RDI es Pabellón 4, de Diego Gachassin (2017). Alberto Sarlo, abogado y escritor, lleva adelante un proyecto tan utópico como integrador: enseñarles filosofía, literatura y boxeo a 52 presos del Pabellón 4 de una cárcel de máxima seguridad en las afueras de Buenos Aires. Los internos hablan de Hegel, Sartre, Dostoievski, del superhombre… Escriben cuentos en donde desnudan su alma y cuentan partes de su experiencia carcelaria. La filosofía los ayuda a repensar sus vidas, sus destinos y sus decisiones. Uno de los protagonistas es Carlos “Kongo” Mena, un preso que acaba de salir en libertad, y vuelve a la cárcel como el ayudante de Sarlo, dando su visión desde un lugar más cercano a la realidad de los presos. Para muchos de ellos es la viva imagen de que la redención es posible. Carlos tiene muchos proyectos ahora que está en libertad. La cultura y la voluntad hicieron de Carlos un hombre nuevo.