Alejandro Marón habla desde Lima, a donde viajó para hacer lo mismo que en Buenos Aires. Asesorar y poner en sintonía los estatutos de la AFA y las demás asociaciones nacionales con las normas de la FIFA. El ex presidente de Lanús es abogado y trabaja en la Conmebol. Durante una entrevista con PáginaI12 repasó los tres días de reuniones con dirigentes argentinos, en qué se avanzó y cuáles son los temas que siguen pendientes.
–¿Qué está haciendo en Perú con los representantes de la FIFA?
–Esto forma parte de un proceso que se lleva adelante en todas las asociaciones. Lo de nuestro país se circunscribe al papel que cumple la comisión normalizadora, y la FIFA le impuso que antes de haber elecciones debe reformar los estatutos. Pero es algo que también se está haciendo en Perú, Uruguay, Paraguay, Colombia, Chile, en todos lados.
–¿Con qué conclusiones se fue después de las reuniones mantenidas en el hotel Sheraton con distintos representantes del fútbol argentino?
–Ahí quedó abierto el debate. Algunos sectores defendieron férreamente sus intereses y otros fueron por su lado. Pero se redondeó un borrador muy borrador, muy esqueleto, que se va a pasar desde la FIFA a la AFA en más o menos diez días, y después ésta lo va a hacer circular en los clubes para que hagan sus nuevos aportes, y que finalmente se le entregue una devolución a la federación.
–O sea, ¿quiere decir que se avanzó y quedaron despejadas las amenazas de una desafiliación, como ocurrió con el caso de la Asociación de Guatemala?
–El balance fue positivo porque durante los tres días pasó por las reuniones todo el fútbol argentino. Cada día se conversó durante once o doce horas y resultó muy favorable que todos los sectores se prestaran al debate.
–¿Quién decidió que fueran invitadas personalidades del fútbol que no representan a la dirigencia y que a menudo no participan de estas discusiones?
–La FIFA y la Conmebol establecieron los parámetros de los sectores que debían estar representados, como el de los grupos de interés: futsal, fútbol femenino, fútbol playa, ex árbitros, ex futbolistas y ex entrenadores. Después la comisión normalizadora interpretó ese pedido y convocó a Menotti, Elizondo y Latorre entre otros.
–¿Qué es lo que debe hacer la AFA para que su estatuto se adecúe a las normas FIFA? ¿Por dónde pasan las coordenadas fundamentales?
–Hay cuatro o cinco puntos. El tema de controles y auditorías internas y externas. La cantidad de miembros que no deberán ser designados por el Comité Ejecutivo y sí por la Asamblea respetando determinados principios. Un sistema de administración diferenciado de la conducción política que tenga un secretario general rentado y fuera de ese ámbito político. La presencia de los llamados grupos de interés que le mencioné y que van a tener representación en la Asamblea. Un tribunal electoral independiente. Hay varios ítems que marcan una clara diferencia conceptual con el modo de gestión que hay hasta ahora.
–¿La disminución de los integrantes de la Asamblea que pretendía la FIFA y es el órgano soberano de la AFA, al final no será tan pronunciada como se pedía antes de las reuniones?
–Se bajó en principio de 75 a 56 miembros. Pero habrá doce que se sumarían a razón de dos por cada grupo de interés. O sea, unos 68. El último día el tema quedó un poco trabado porque el estatuto vigente prevé una norma para el 2020 en que bajará la cantidad de equipos en Primera División, de modo que disminuirá también la proporción de los representantes de esa categoría. Dentro de ese esquema los que no estarían bajando serían los representantes de las Ligas del interior más que los del Ascenso.
–¿La FIFA mantiene firme su postura de que el dinero que ingrese al fútbol lo debe administrar la AFA y no una Liga o Super Liga paralela?
–La posición de la FIFA es que la Super Liga o la Liga -porque los argentinos somos grandilocuentes-, es una organización que debe estar aprobada por la AFA y tiene que haber un acuerdo que determine las condiciones de esa relación. Con lo cual no existe esa cuestión de que la Liga tendrá vuelo propio. O sea, yo me constituyo y voy por afuera. Es necesaria una previa aprobación y un convenio avalado también por AFA del reparto de competencias.
–¿Pero la FIFA se va a meter en el tema de quién controla los fondos de la TV o sea, quién recauda los principales ingresos?
–No, porque claramente le corresponde a la asociación local.
–¿Qué papel jugará de ahora en más la comisión normalizadora con respecto a estos cambios?
–Lo que tiene que hacer la comisión es ser el vehículo entre la FIFA y los clubes.
–Pero supongamos que estos últimos no generan consensos, vuelven los conflictos y un clima peor o semejante al de la votación del 38 a 38. ¿Qué pasaría?
–Este estatuto lo tienen que aprobar 60 de 75 asambleístas. O sea, hay que ver qué ocurriría si se llega a una asamblea y no se consigue la aprobación. La pelota debería volver a Zurich y la FIFA definirá cómo sigue esta película.
–¿Hay un plazo para votar la aprobación del nuevo estatuto?
–No, el tema es así: la FIFA le dio plazo hasta el 30 de junio a la comisión, pero los presidentes de todos los clubes de Argentina están pidiendo elecciones ya. La FIFA ya les dijo que si quieren votar un presidente, primero deben reformar el estatuto. Entonces se van a tener que apurar porque no pueden alterar ese orden que les estipuló la FIFA. Si quieren elecciones más rápido deben ponerse de acuerdo y llegar a esa elección.
–Por último, también es un tema clave la exigencia de la FIFA para que existan dos categorías profesionales y el resto jueguen fútbol amateur. ¿Cómo van a hacer para que esa disposición se aplique en la Argentina donde hay cinco categorías profesionales?
–La FIFA dijo que hay tres estamentos de representatividad. Un grupo de élite, uno amateur o aficionado, de segundo nivel y el tercero que integran los grupos de interés. Como la Argentina es un caso atípico porque tiene cinco categorías profesionales, hay que decidir quiénes entran en el grupo de élite o en el segundo sector.
–¿Pero que sería un grupo de élite?
–El concepto que tiene la FIFA es profesional barra élite. Porque en la mayoría de las asociaciones hay una categoría profesional o dos y nuestro país es un caso atípico, como le dije.
–Pasemos el tema en limpio. ¿La FIFA impone estos niveles pero no le va a decir a la AFA quiénes deben estar en ellos?
–Exacto. No se va a suprimir el profesionalismo, sino que a la hora de determinar la representatividad en una Asamblea, la FIFA la divide en tres grupos. No es que el profesional pasará a ser amateur por decreto.