La nueva etapa de la cuarentena en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), que se extenderá hasta el 17 de julio, arrancó este miércoles con un fuerte operativo cerrojo en los accesos a la Ciudad, lo que provocó largas filas de vehículos y demoras en el ingreso, y un cruce entre funcionarios de provincia y Nación. La primera jornada, estuvo también marcada por los fuertes controles a los pasajeros en los centros de trasbordo, terminales de trenes, subtes y colectivos, que solo pueden ser utilizados por aquellas personas que tramitaron el nuevo permiso de circulación para trabajadores esenciales. Todas estas medidas, sumada a la caída del 50 por ciento de los permisos para circular, hizo que el uso del tansporte público en el AMBA disminuyera el 8,7 por ciento respecto de la semana pasada, que transitaran por las autopistas de la Ciudad en hora pico un 42 por ciento menos de vehículos y las calles porteñas se vieran bastante más vacías que en los últimos días.

Desde la medianoche del miércoles comenzaron a regir los nuevos Certificado Únicos Habilitantes de Circulación (CUHC) para trabajadores esenciales en lo que es una vuelta a la cuarentena dura en el AMBA, tras el aumento acelerado de casos de coronavirus registrados en los últimos 20 días en esta área, y ante el riesgo de que colapse el sistema sanitario de la Ciudad y el bonaerense. De esto permisos, poco más de dos millones, de los más de cinco que había vigentes, fueron renovados.

No obstante esta fuerte reducción, con el cierre de la mayoría de los accesos a la capital, y los controles intensificados en los retenes para verificar los permisos de circulación de los conductores, a cargo de la Policía Federal y de Gendarmería Nacional, se generaron atascos y demoras en los distintos puntos habilitados para el ingreso. El Ministerio de Seguridad informó que 1.200 efectivos intervinieron en el operativo de control que incluyó puentes, accesos y los peajes alrededor de la ciudad, y otros 2.500 en el control de las 241 estaciones de tren del AMBA.

El blindaje produjo largas colas de vehículos en el Puente Pueyrredón, Puente La Noria, Panamericana y General Paz y en Acceso Oeste, así como también en la Autopista Buenos Aires-La Plata. Mientras la congestión de vehículos particulares se concentró en Puente Pueyrredón, en la autopista Panamericana y la General Paz, el mayor conflicto se presentó en Puente La Noria, donde la fila de vehículos se extendió 10 kilómetros. Este atasco en particular quedó en el centro de las noticias porque generó una intervención del ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, quien trató de resolver el problema, que no estaba bajo su óribta sino de la Federal, y terminó en un nuevo cortocircuito con el Ministerio de Seguridad de la Nación.

De todas formas, más allá de los atascos, las cifras mostraron una reducción importante de la circulación en la ciudad. Según detalló la Secretaría de Transporte porteña por las autopistas de la Ciudad circularon en las primeras horas de la mañana 10 mil vehículos, que representan un 42 % menos que la semana anterior, y un 37 % menos que el tránsito que había antes de comenzar el aislamiento preventivo. Hacia el final del día, esas cifras se elevaron hasta 107 mil vehículos, lo que significa un 30 % menos que el día anterior y un 33 menos que la semana pasada.

Por otra parte, en esa misma franja horaria, los sensores que tiene la Secretaría de Transporte en las principales avenidas porteñas registraron una circulación de 140 mil vehículos, una baja del 19 por ciento en las últimas 24 horas, que significa una caída del 35 por ciento respecto al miércoles pasado. Mientras que en el subte, si bien la caída fue menor, de sólo el 2 por ciento respecto al martes, la cifra de pasajeros sigue siendo baja: transportó 52 mil pasajeros, que representan el 5% del volumen habitual que viajaba antes de la cuarentena, cuando las 6 líneas y el premetro trasladaban 1.112.000 pasajeros diariamente.

En el tren se realizaron 97 mil viajes, un descenso del 19 % respecto a la semana pasada, y un 88 % menos que antes de iniciado el aislamiento social. En tanto los colectivos, que realizan el 80 % de los viajes que se hacen en transporte público, trasladaron 1.847.000 pasajeros, una caída del 11 %con respecto al miércoles pasado, y representa el 20 % de la gente que se transportaba un día habitual antes de la cuarentena. También el sistema de Ecobici registró una baja significativa: contabilizó 724 viajes, 70 % menos que la semana pasada.

Las principales avenidas de acceso al centro porteño mostraron un panorama similar al del resto de las arterias en la primera jornada de endurecimiento del aislamiento, que incluyó el cierre de comercios y la restricción para las salidas deportivas al aire libre, tras el aumento acelerado de contagios en el AMBA, que concentra el 97 por ciento del total de los casos registrados en el país. 

En este sentido, la subsecretaria de Gestión de la Información, Educación y Fiscalización del Ministerio de Salud bonaerense, Leticia Ceriani, dijo que el endurecimiento de la cuarentena en AMBA es "la única forma de volver a aplanar la curva y evitar la saturación del sistema". Y advirtió que el ascenso abrupto de la curva de casos y de la ocupación de camas, "son indicadores que nos preocupan y por eso veníamos planteando la necesidad de tomar una medida. Proyectábamos que en 20 días podíamos estar en una situación de saturación del sistema y por eso la decisión que se tomó", señaló.