Mattia Binotto, jefe de equipo de Ferrari, ha alzado nuevamente su voz este lunes en medio del difícil momento que atraviesa la escudería italiana, quinta en el campeonato de constructores de la Fórmula Uno y todavía más atrás entre las posiciones de pilotos, para realizar una dura autocrítica sin dejar de señalar que "despedir a las personas no hace que un automóvil vaya más rápido", en una clara referencia a los señalamiento sobre él y otros técnicos de su grupo de trabajo.

"Después de tres carreras, está claro que estamos en peor forma de lo que esperábamos y tenemos que reaccionar sin demora", dijo Binotto en diálogo con ferrari.com. “Se debe revisar todo el proyecto del automóvil, teniendo en cuenta los límites impuestos actualmente por las regulaciones. Soy consciente de que no hay una varita mágica en la Fórmula 1, pero tenemos que acelerar para cambiar las cosas, tanto a corto como a largo plazo. También podría ser necesario mirar a nuestra organización para mejorar y fortalecer nuestros métodos de trabajo donde la necesidad es mayor. Pero primero, como equipo, debemos entender la dinámica que condujo a esta situación".

En el GP del domingo pasado, en el Hungaroring de Budapest donde salió victorioso el inglés Lewis Hamilton (Mercedes), Sebastian Vettel fue el mejor de la escudería roja, al conseguir el 6º puesto, mientras que el joven Charles Leclerc finalizó 11º. El fin de semana anterior, en Styria, los resultados fueron todavía peores: los pilotos se chocaron en la primera vuelta y debieron abandonar, sin ningún tipo de acción sobre la pista.

Sus palabras resuenan en un contexto de extrema sensibilidad para los fanáticos de la escudería italiana, que se ubica a 94 puntos de Mercedes, el líder actual del campeonato de constructores, a tres fechas de iniciada la temporada. Sus pilotos, a su vez, tampoco pudieron posicionarse como se espera de uno de los equipos con mayor presupuesto del Gran Circo: mientras que el monegasco Leclerc se ubica en la séptima colocación, el alemán Vettel marcha décimo.

Binotto no olvidó referirse a los señalamientos sobre él mismo y otros técnicos de Ferrari: “Tengo confianza en las personas que trabajan en la gestión deportiva: hemos comenzado un largo proceso que debería conducir a otro ciclo ganador. Tomará un tiempo, pero toda la compañía comprende y apoya esta visión. Es por eso que me resulta divertido leer algunas historias que están dando vueltas: despedir a las personas no hace que un automóvil vaya más rápido".

El complejo momento que atraviesa la escudería de Maranello llevó a que también este lunes apareciera en escena Luca Cordero di Montezemolo, presidente de la compañía de 1991 a 2014. El ex ejecutivo expresó su preocupación por la falta de competitividad mostrada por Ferrari en este Mundial y aseguró que "hay que dar por perdida esta temporada".


"Hay que tener el coraje de dar por perdida esta temporada, pero estoy muy preocupado por las próximas
, porque estamos perjudicando también al 2021 y al 2022. El problema es de organización. Ahora una sola persona, y joven, tiene muchas responsabilidades, porque Mattia Binotto es solo y también debe gestionar a los pilotos", afirmó Montezemolo en una entrevista a "GR Parlamento".

Los señalamientos a Binotto, jefe del equipo del Cavallino Rampante, llevaron a que la semana pasada él mismo asegurara que la adaptación de los monoplazas de Ferrari a los parámetros que la Federación Internacional del Automóvil (FIA) provocó una baja de rendimiento en su unidad de potencia, algo que viene siendo evidenciado desde el comienzo de la temporada.

"Me parece excesivo hablar de refundación del equipo, pero la directiva de Ferrari debe tomar decisiones con coraje", agregó Montezemolo. El ex directivo también advirtió que el fichaje del español Carlos Sainz (McLaren), pese a ser correcto a nivel de estrategia deportiva, ha sido anunciado demasiado pronto y aumenta la presión sobre Leclerc.

"Yo honestamente no cambiaría tan pronto a (el alemán, Sebastian) Vettel, incluso porque ahora hay mucha presión sobre Leclerc -explicó-. No nos olvidemos de que es muy joven, solo ha llegado el año pasado y todavía no ha ganado nada. No es fácil que convivan dos grandes y es correcto quedarse solo con uno, pero habría esperado en dar la noticia. El problema de Ferrari no son los pilotos, sino un coche que está muy lejos de ser competitivo".