Al diseñador Coco Cerrella se lo conoce por su labor docente en las cárceles donde enseña afichismo y derechos humanos y por su amplia promoción del aspecto social del diseño. Por eso no es casual que, pandemia y necesidades de los sectores más vulnerables mediante, se pusiera en campaña para desarrollar un emprendimiento solidario.

Así nace “Olla, obra que comprás, alimento que donás”, una tienda online en la que a través de la donación de diseños y obra de varios diseñadores y artistas busca colaborar con comedores comunitarios.

“A raíz del aislamiento social obligatorio, la concurrencia a los comedores comunitarios se multiplicó. Muchas personas en situación de vulnerabilidad dependen de estos espacios para acceder a una alimentación diaria. Con el fin de ayudar a estos centros comunitarios, nace esta idea donde obras de reconocidos profesionales del país e internacionales creadas especialmente para esta campaña son donadas y la totalidad de lo recaudado se destinará a la compra de alimentos para seis comedores comunitarios, distribuidos entre Buenos Aires y Córdoba. La logística de compra y distribución de alimentos estará a cargo de la asociación civil Ingeniería Sin Fronteras Argentina que viene realizando esta tarea desde el comienzo de la pandemia”, adelanta Cerrella.

Todos trabajaron bajo el concepto de integración, y además de cuadros, la obra puede consumirse en otros formatos, desde stickers a remeras para que nadie se quede con las ganas de aportar su grano de arena.

Elliot Tupac, Tano Verón, Laura Varsky, Gastón Pacheco Art, George Manta, Alfon Lunar, Falu Carolei, Pato Oliver, Santi Pozzi, Angela Corti, Ana Sanfelippo, Max Rompo, Rndr Martinez, Isidro Ferrer, San Spiga, Jime Diaz Ferreira, Lara Costafreda, Hifu, Panda Letras, Villy Villian, Coco Cerrella, Seba Acampante, Pablo Pacheco son parte de la movida de la que se puede saber más en www.olla.flashcookie.com  o el instagram @ollaarte .

Mientras que los fondos serán destinados a la Asociación Civil Los Amigos (Barrio Sarmiento, San Martín), El Hogar de mis Sueños (Bernal Oeste, Quilmes, GBA), Salón comunitario El Polito (Barrio Zepa B, Córdoba), Asociación Civil Las Omas (Camino a Chacra la Merced, Córdoba), Centro de Atención a la Niñez Nuestra Señora de la Esperanza (Villa La Florida, Quilmes) y Comedor comunitario Todos por una Sonrisa (Barrio Altos de San Lorenzo, La Plata, entre otros.

Diseñadores en cuarentena

“Desconcertado, incrédulo, enojado, algo angustiado, así me sentí cuando empezó. En estos meses tuve cerca de doscientos alumnos virtuales, muchas horas de clase que me permitieron seguir trabajando. Me siento muy cansado, pero a la vez consciente de estar en una posición privilegiada. Por eso se me ocurrió el proyecto. Primero pensé en hacer una tienda online con mi obra personal y donar el 100% de las ganancias. Luego entendí que eso mismo tendría un impacto muchísimo mayor siendo colectivo, uniendo talentos y corazones nobles. Redacté la idea y empecé a convocar a colegas y amigos del mundo de las artes visuales. El sí fue inmediato. Así que hoy mi trabajo con Olla consiste en unir partes: profesionales dispuestos a donar su obra o diseño, una plataforma online de venta de productos de diseño, la organización social Ingeniería Sin Fronteras Argentina, gestionando la compra y distribución de alimento y por supuesto, las personas que la están pasando mal en serio. En puchos de tiempo y trasnochadas se fue construyendo colaborativamente”, aclara.

“Por primera vez después de casi ocho años, se cortaron mis clases en la cárcel de Devoto. La cuarentena allá comenzó en simultáneo con otras instituciones educativas. Extraño mucho esas aulas y ese espacio de reflexión permanente. Con respecto al sector en general o los colegas con los que estoy en contacto, creo que vamos subidos a una montaña rusa y eso repercute en la creatividad. Yo me embalo, me desanimo, me enojo por desanimarme, vuelvo a caer, me paro y arranco de nuevo. Estamos todos afectados, pero hay hambre en el país y eso es definitivamente inaceptable. Los que tenemos privilegios no podemos darnos el lujo de mirar la vida pasar desde el sillón de casa. Olla nace desde esa convicción”, remata.