"Pudimos burlarnos de la cuarentena. ¿No nos podemos juntar? Bueno, vamos a tocar igual". Gustavo "Popi" Spatocco suena contento y orgulloso, y tiene sólidas razones: la iniciativa de la Asociación de Profesores de la Orquesta Estable del Teatro Colón tiene algo de quijotesco y un resultado artístico de alta belleza , conseguido aun en medio de la paralización de la actividad y con el objetivo de homenajear a los trabajadores de la salud. Es un triunfo sobre las dificultades, con Popi arreglando y enviando partituras por mail, cada músico grabando en su casa y luego Popi compaginando y nivelando todos esos audios para conseguir el demoledor efecto de la orquesta sonando como si estuvieran todos juntos allí.

"Todo lo que se escucha es verdad, no hay teclado, sintetizador ni emulador. Todo se tocó", cuenta Spatocco. "Es un gran esfuerzo pero que hacemos con gusto: es nuestro aporte, nuestro granito de arena en este momento tan difícil de nuestro país, y la oportunidad de decir algo." El tema de Cerati fue elegido por sus obvias cualidades pero también y sobre todo por la letra: "Quisimos utilizar la musica para dar un mensaje acorde a este momento que estamos viviendo, y esa letra tiene un significado que tiene mucho peso. Como sucede con las buenas poesías, las letras de Gustavo no se cierran, se abren a muchos significados posibles". Para el director y arreglador, además, no es nada menor que la iniciativa haya surgido desde los músicos, que pusieron toda la voluntad, la garra y las ganas sin cobrar un peso. "Este mundo va a cambiar y nosotros podemos hacer un aporte. La música te lleva a lugares donde somos mejores", dice Popi. "Hasta el tipo más hijo de puta puede ante la música sentir una emoción en la que puede ser un poco más bueno."

El flautista Fabio Mazzitelli, vocero de la Asociación de Profesores, también infla el pecho. "Poder homenajear desde tu casa a los trabajadores esenciales de la salud en una situación tan difícil genera una energía y una emoción muy grande", señala el músico, que recuerda que la pandemia truncó el estreno de Nabucco en el Colón, y empezaron los contactos entre ellos para ver qué hacer ante el teatro cerrado, y por ello el primer video que hicieron fue la obertura de esa ópera, seguido por otra conmovedora versión de "Zamba de mi esperanza" con Nahuel Pennisi. "Esta Asociación nació en 1988 para generar proyectos artísticos y defender ciertos derechos, y hacer algo así tiene que ver con su esencia", dice. "Queremos mantener un contacto con el público, y emitir un mensaje, poner todo nuestro esfuerzo para aportar desde este lugar. Somos músicos, ¿qué otra cosa podemos ofrecer sino tocar?"