La decisión del Ministerio de Educación de la Nación de impedir que 6.000 alumnos porteños vuelvan a la escuela en el momento de mayor contagios de coronavirus, fue acompañada por los gremios docentes de la Ciudad que desde un principio rechazaron la iniciativa del jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta.

"La solución al problema de falta de conectividad es proveer a los chicos de dispositivos y no poner en riesgo la salud y estigmatizarlos", afirmó Eduardo López, secretario general adjunto de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE-Ctera).

Desde el gremio docente señalan que la iniciativa de la ministra Soledad Acuña, hace responsables a los estudiantes por no tener conectividad, "cuando en realidad es el Gobierno quien tiene que hacerse cargo". 

Según Eduardo López, existe una falta de voluntad política por parte del Ejecutivo porteño para resolver el problema. "La solución no es económica, sino política. Dar dispositivos a esos seis mil chicos insume menos dinero del que el Gobierno de la Ciudad destina al Tiro Federal".

"Desde marzo, venimos denunciando que la brecha digital, es brecha educativa y que Horacio Rodríguez Larreta debe garantizar el derecho social a la educación. En tiempos de aislamiento, la escolaridad no es una responsabilidad individual ni familiar sino que es el Estado quien debe invertir en conectividad y dispositivos para ser utilizados por los estudiantes, en sus hogares, y de esta forma proteger su salud", afirmó el representante gremial.

El rechazo al protocolo porteño también fue celebrado por la Asociación de Enseñanza Media y Superior (Ademys), cuya secretaria general, Mariana Scayola, señaló que "es un logro de la comunidad educativa" y justificó su postura al plantear que Rodríguez Larreta "no prioriza el cuidado de la salud de los chicos, ni de los trabajadores que asisten a las escuelas, porque las ve como guarderías o cibers, donde dejar a los niños".

"La solución nunca puede ser una que exponga a estos alumnos, a los docentes, a sus familias y a toda la comunidad porque abriendo las escuelas se incrementa la circulación y el uso del transporte público", agregó la gremialista.