Con la mira puesta en la ocupación de camas críticas y el constante aumento de contagios, las autoridades continúan evaluando mayores restricciones para evitar el colapso sanitario. “Posiblemente haya que tomar medidas que propendan a disminuir la circulación de la gente y a dar un respiro al sistema de salud, para mantener los buenos índices que todavía tenemos en Santa Fe, como es la letalidad y contagios cada 100 mil habitantes, que siguen siendo bueno respecto al promedio nacional”, consideró ayer el ministro de Gobierno, Esteban Borgonovo. La curva de contagios volvió a pegar un salto al registrarse 747 casos en la provincia, de los cuales 412 corresponden a Rosario, lo que representa un nuevo record desde el inicio de la pandemia. Por otra parte, ayer se informaron cinco nuevos decesos.

"En Rosario el nivel de ocupación de camas críticas es del 75% en el sector público y del 70% en el sector privado, los dos en aumento", precisó ayer la vicegobernadora Alejandra Rodenas tras presidir la reunión del Comité de Crisis de Emergencia en la sede de Gobernación junto al ministro Borgonovo, su par de Trabajo, Roberto Sukerman, y las ministras de Salud, Sonia Martorano, y de Medio Ambiente, Erika Gonnet. La vicegobernadora dijo que la ocupación de camas críticas en Santa Fe es del 60%. Según el reporte epidemiológico emitido ayer, 86 pacientes se encuentran internados en cuidados intensivos, 40 con asistencia respiratoria mecánica.

"Estamos en el inicio del tránsito hacia el pico que venía siendo anunciado por las autoridades sanitarias y el comité de expertos de salud, por eso tenemos que evaluar las situaciones a seguir", agregó Rodenas, para luego asegurar que "por el momento" no estaba en condiciones de anunciar un retroceso de fase en Rosario. De todos modos, ante el aumento de casos y con un tiempo de duplicación de nueve días, la decisión de volver al aislamiento sería inminente. "Volver atrás sería la última opción, pero los números ya hace más de dos semanas que indican objetivamente que hay que retroceder", apuntó una fuente del gobierno provincial para describir la situación.

En ese marco, el ministro Borgonovo indicó: "El escenario ha cambiado; estamos empezando a transitar cuesta arriba hacia un pico (de contagios) que no sabemos dónde está", por lo que no  descartó tomar medidas para "disminuir la circulación de la gente y a dar un respiro al sistema de salud". Según el funcionario, "tenemos una situación que tenemos que preservar, lo que no podemos hacer es seguir incrementando el ritmo de los contagios y la demanda del sistema de salud porque llegaríamos al colapso que queremos evitar". 

El titular de la cartera de Gobierno explicó que existe una labor proactiva en la tarea de detección. “Tenemos más casos porque hacemos más testeos, pero también porque tenemos circulación viral”, indicó, y amplió: “El índice de positividad está superando el 50 por ciento; el escenario ha cambiado y tenemos que disminuir los contagios y preservar el sistema de salud”. Consultado por la capacidad de respuesta de la línea telefónica de consultas (0800 555 6549), dijo que se registraron “bajas importantes en los operadores”.

Además de los 412 casos confirmados de Rosario, que ya acumula 4.586, el Ministerio de Salud informó 44 de Santa Fe (1 caso fue notificado en otra jurisdicción), 30 de San Lorenzo, 28 de Venado Tuerto, 21 de Funes, 20 de Casilda, 17 de Villa Cañas, 14 de Soldini, 12 de Granadero Baigorria, 12 de Villa Gobernador Gálvez. (1 caso fue notificado en otra jurisdicción), y 11 de Fray Luis Beltrán, entre las localidades que sumaron más positivos. El total desde el comienzo de la pandemia en Santa Fe a la fecha es 9.329.

Por otra parte, ayer se informaron cinco nuevos decesos, 3 pacientes (63, 84 y 93 años) con residencia en Rosario, 1 paciente (86 años) con residencia en Capitán Bermúdez y 1 paciente (70 años) con residencia en Casilda, todos con comorbilidades. Hasta el momento ascienden a 97 los fallecimientos con Covid 19 en la provincia.