La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos Michelle Bachelet pidió evitar cualquier acción que impida la celebración de elecciones pacíficas este domingo en Bolivia. La expresidenta de Chile advirtió que de lo contrario el país podría verse sumido de nuevo en una crisis social. El pedido de la Alta Comisionada fue tanto a las autoridades bolivianas como a los distintos actores políticos y sociales del país. "Nadie quiere que se repitan los acontecimientos del año pasado, que dieron lugar a vastas violaciones y abusos de los Derechos Humanos”, dijo Bachelet. Por su parte, Luis Arce, candidato del Movimiento al Socialismo (MAS) manifestó su preocupación por la falta de transparencia en el conteo de votos. El exministro expresó sus críticas al Tribunal Supremo Electoral (TSE) durante una reunión con organismo que actuarán como veedores de la elección.

"Eviten nuevos actos de violencia"

La exmandataria manifestó su preocupación por el desarrollo del proceso electoral en Bolivia. “Saludo la determinación del pueblo boliviano de participar en las elecciones. Todos deberían poder ejercer el derecho al voto en paz, sin intimidaciones ni violencia. Estas elecciones representan una oportunidad para avanzar en los frentes social y económico, y para disminuir la extrema polarización que ha afectado a Bolivia en los últimos años", dijo la funcionaria de la ONU. También expresó su profunda preocupación por el lenguaje incendiario y las amenazas proferidas por algunos actores políticos en las últimas semanas, así como por el creciente número de agresiones físicas que se registraron. "Es esencial que todas las partes eviten nuevos actos de violencia que puedan desencadenar enfrentamientos", sostuvo la expresidenta.

Bachelet hizo mención a los actos de violencia que tuvieron lugar en el país tras la salida del poder de Evo Morales. "Nadie quiere que se repitan los acontecimientos del año pasado, que dieron lugar a vastas violaciones y abusos de los Derechos Humanos --entre los que se cuentan por lo menos 30 muertos y más de 800 heridos-- y que, en última instancia, todos pierdan", subrayó la Alta Comisionada. A su vez expresó su deseo de que los comicios del domingo se desarrollen de manera pacífica, participativa e inclusiva, en un ambiente que garantice el respeto de los Derechos Humanos de todas las personas.

El trabajo de la ONU en Bolivia

En noviembre de 2019 la Oficina de la Alta Comisionada envió a Bolivia una misión que aún permanece en el país. La comitiva tiene la tarea de supervisar e informar sobre la situación interna. En agosto de este año el organismo publicó un informe en el que detalló las graves violaciones de los Derechos Humanos cometidas entre el 20 de octubre y el 25 de noviembre del año pasado, en medio la crisis política tras las elecciones presidenciales. El documento está basado en más de 150 entrevistas con testigos, víctimas, representantes de la sociedad civil y autoridades. 

Allí la ONU había hecho referencia a asesinatos, torturas, malos tratos y detenciones arbitrarias. También manifestó su preocupación por el estancamiento en las investigaciones sobre las Masacres de Sacaba y Senakata. “Me preocupa profundamente que, nueve meses después, aún no ha habido rendición de cuentas por las muertes en Sacaba y Senkata, ni para la mayoría de las muertes ocurridas en el período cubierto por nuestro informe”, había manifestado Bachelet. Cerca de 30 personas murieron durante las jornadas de protesta que tuvieron lugar en Bolivia entre el 20 de octubre y el 25 de noviembre. De ese número al menos 20 muertes ocurrieron durante operativos de la policía y las fuerzas armadas.

Las dudas de Arce

A su vez Arce aprovechó los últimos días de la campaña para reunirse con los distintos organismos que vigilarán el proceso electoral. “Estamos reunidos con la representación de la ONU que está en Bolivia en calidad de observadores de las elecciones que se realizarán el 18 de octubre y todo el proceso electoral”, manifestó el candidato en Twitter. El exministro informó sobre las irregularidades que podrían verse durante el escrutinio. “Transmitimos nuestra preocupación por las últimas determinaciones asumidas por el TSE respecto a las restricciones para acceder a las actas en el conteo rápido de votos”, publico Arce en la red social. Luego precisó que el TSE había informado que no podrían verse las fotos de estas actas. También dijo que varios militantes del MAS estaban sufriendo el hostigamiento de las autoridades del gobierno de facto. “Expresamos nuestra preocupación por la constante persecución política durante la campaña. La celebración de elecciones deber ser con respeto a los derechos de todos”, dijo el economista. En particular hizo referencia a la situación de varios dirigentes sociales de la ciudad de El Alto, en La Paz.

Por su parte el enviado especial de la ONU Jean Arnault dijo que harán un seguimiento riguroso antes, durante y después de las elecciones. Además remarcó que el objetivo de la misión también es evitar violaciones a los Derechos Humanos y actos de violencia en el país. “Esperamos que la presencia de nuestros colegas justamente ayude a prevenir este tipo de acción y que la jornada del 18 sea la más pacífica en lo posible”, manifestó Arnault. Además de la ONU también participarán como veedores la Organización de Estados Americanos (OEA), la Unión Europea (UE), la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina (COPPPAL), el Parlasur, la Unión Interamericana de Organismos Electorales (Uniore) y el Centro Carter, entre otras.

Desde el equipo de campaña de Arce también denunciaron las constantes amenazas y provocaciones vertidas por el ministro de Gobierno, Arturo Murillo. Según la campaña del MAS el ministro hizo referencia a grupos que convulsionarían el país el día de las elecciones. También mencionaron que bajo esa excusa la dependencia que depende de Murillo había incrementado gastos, específicamente para la comprar de armamentos.