A la puertas de una reunión importante con el Fondo Monetario, el ministro de Economía, Martín Guzmán, envió al Congreso un proyecto de ley con el que busca evitar que las políticas de endeudamiento sean vicios inconsultos de los gobiernos de turno. Un acuerdo de facilidades extendidas “es un resultado que va en la línea de generar más estabilidad en el frente cambiarlo y también de fortalecer el mercado de deuda pública y de instrumentos de financiamiento en general en pesos”, afirmó Guzmán.

"Esta semana presentaremos un proyecto para convertir la sostenibilidad de la deuda en una política de Estado", señaló Guzmán durante un seminario virtual convocado por la organización gremial internacional UNI Global Union. La normativa pretende que todos los acuerdos que se alcancen con el Fondo Monetario Internacional (FMI), incluidos los programas de multilaterales, tengan aval parlamentario

"Los préstamos en divisas tienen que ser responsables, de ahí que resulte aconsejable darle mayor decisión al Congreso", aclaró Guzmán. Y en cuanto al rol de los organismos multilaterales en la actual crisis mundial, sugirió que "son necesarias importantes reformas a nivel internacional, no sólo ahora durante la pandemia, sino también de cara al futuro".

El ministro, además, destacó la necesidad de avanzar en los consensos alcanzados durante el encuentro del G20 (Grupo de los Veinte) en cuanto a "una ampliación de los derechos especiales". "Es el momento de ampliar los derechos especiales de giro, es esencial crear liquidez, se necesita del liderazgo del FMI y este es el momento para hacerlo", indicó el ministro de Economía. La ampliación de esos derechos especiales "sería positivo para todo el mundo" y "es importante que se pongan a disposición créditos para financiar infraestructuras públicas, que es un factor multiplicador de la economía", dijo Guzmán.

Misión posible

Con una comitiva nutrida encabezada por Luis Cubeddu y Julie Kozak, desembarca este martes una nueva misión del Fondo Monetario. "Se van a quedar varias semanas", dijo a Página I12 una fuente oficial que tiene contacto directo con el armado de las agendas. Luego de su paso por el país en octubre, donde se reunieron además con empresarios y dirigentes de la CGT, los enviados de Kristalina Georgieva vienen a un partido por los puntos con los equipos de Guzmán. 

"Lo que se busca es una resolución sensata para ambas partes, hay una comprensión de cómo es la situación", contó a este diario una fuente del organismo. En el Gobierno desestiman que haya pedidos de ajuste, y en esa línea se manifestó el propio Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero. Pero saben que la negociación será dura. 

"El ajuste, primero lo hizo Macri, y después la pandemia", admitieron en el entorno del ministro, donde sostienen que hace tiempo vienen charlando con el FMI, a nivel local y en Nueva York, donde Sergio Chodos, representante argentino ante el organismo, hace un trabajo silencioso pero intenso. 

En el Gobierno admiten que un ajuste es improbable pero Guzmán manifiesta a cada paso que no se puede continuar con políticas que no se preocupen por la salud de las cajas. En las últimas horas, el ministro ha dado gestos en ese sentido. Y la gran batalla del ahorro lógico serán los subsidios a las tarifas de servicios públicos. Según supo este diario, ya trabaja junto a Energía en una segmentación de los subsidios por consumo, aún más detallada de la existe hoy, que haga que no pague el que realmente no puede. 

En su charla en el seminario europeo, Guzmán dio algunas pistas de lo que se viene. "Entendemos que no hay restauración de la estabilidad macroeconómica sin la recuperación del crecimiento económico”, explicó, y en cuanto a los lineamientos que formarán parte de la mesa de negociaciones, aclaró que "en los los tiempos venideros será muy importante que los programas del FMI se basen en premisas apropiadas".

De acuerdo a su visión, esas premisas se deben respaldar "en la evidencia, con una participación generalizada a nivel nacional cuando se trata de discutir los términos de un programa con el FMI”.

“Es muy importante cuando enfrentamos una situación de carga de la deuda insostenible, que se aborde de manera oportuna y suficientemente bien”, consignó el ministro. Esto implica, según el ministro, "que haya una redefinición de los contratos de deuda con suficiente alivio para que se puedan implementar las políticas que sean necesarias para la recuperación económica”. Concluyó Guzmán que, de hecho, cuando no se percibe ese alivio "se observan problemas más profundos que hacen crecer el desempleo, la pobreza y la desigualdad".